La jornada fue de las más extrañas, aburridas y anodinas de los últimos años en la Fórmula 1. Sin apenas actividad en la pista en toda la mañana, un severo accidente de Lewis Hamilton con el nuevo Mercedes W05 dejó constancia de lo frágil de estos nuevos coches y de lo complicado que va a ser para los pilotos tomarles confianza.
El alerón del Mercedes cayó en la frenada y el inglíés no pudo hacer nada por detener el coche en la primera curva. Dejó 50 metros de marca en la frenada, hasta impactar de frente contra la barrera de neumáticos. La vista de todo el frontal destrozado hacía pensar en una laboriosa reparación. Es posible que este miíércoles aún no pueda salir a primera hora, si alguna de las nuevas piezas no tiene repuesto.
Fue un aviso de andarse con tiento para sus vecinos en boxes. Kimi Rí¤ikkí¶nen, que no pudo acabar su primera vuelta, detenido por sus ingenieros en la instalación para no romper el nuevo Ferrari F14-T, acabó siendo el mejor de la jornada. No sólo fue el piloto que más pudo rodar (31 vueltas) sino el que más rápido lo hizo, con un tiempo de 1:27.1.
Lo de rápido es un decir, pues a pie de pista se le veía con una cautela exagerada en cada curva, con directrices claras de que no se trataba de un test de velocidad, sino de puesta en marcha general del coche. Pero lo fue para todos y nadie completó una tanda entera de 10 vueltas consecutivas como logró Ferrari. El tiempo es más de seis segundos más lento que Felipe Massa en 2013 el mismo día. Sobran las comparaciones.
Red Bull sólo pudo rodar tres vueltas en toda la jornada, a unos diez minutos de la bandera a cuadros de las cinco de la tarde. Se trató de "un problema estúpido esta noche por parte del equipo", según comentó el director tíécnico, Adrian Newey.
McLaren, ni siquiera salió a rodar, dejando claro que sus problemas eran algo más serios en el chequeo general del coche o incluso el montaje.
El resumen es que Ferrari mostró un mejor nivel en el debut que sus competidores, dentro de lo patíético de la jornada. Queda un camino inmenso por delante para ver competir estos monoplazas al cien por cien de sus posibilidades.
