La Comisión Europea ha autorizado este martes la oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por el grupo mexicano Sigma Alimentos por la empresa alimentaria española Campofrío Food Group -por un importe de cerca de 700 millones de euros- tras constatar que la operación no tendrá un impacto negativo sobre la competencia.
El Ejecutivo comunitario ha constatado que el solapamiento entre las actividades de las partes es muy limitado y que por ello la adquisición no causará problemas de competencia.
El expediente, que se notificó a Bruselas el pasado 16 de diciembre, ha sido examinado por la Comisión mediante el procedimiento simplificado que se aplica a los casos menos problemáticos.
En concreto, Shuanghui decidió finalmente aliarse con Sigma Alimentos y el presidente de Campofrío Food Group, Pedro Ballvíé, en la OPA sobre la cárnica, en la que la china contará con tres miembros en el consejo de administración, incluida la vicepresidencia.
La compañía china y el grupo mexicano llegaron a un acuerdo para repartirse el control de Campofrío, despuíés de que Shuanghui desistiera de su intención de enajenar el número de acciones necesario para reducir su participación del 36,99% a una inferior al 30% con el fin de evitar una oferta sobre la totalidad del capital.
Mediante el acuerdo, Sigma Europa, la sociedad a travíés de la cual la mexicana lanzó la OPA, ostentará una participación aproximada del 81,71% del capital social de Campofrío, tras la aportación por parte del grupo chino de su participación.
Una vez liquidada la oferta, la participación indirecta del grupo chino en Campofrío será del 36,99% y la del mexicano del 44,72%, más las acciones adquiridas en la oferta.
Como parte del acuerdo, se establece que los consejos de administración de Sigma Europa y Campofrío estarán compuestos por siete miembros, cuatro de ellos nombrados por Sigma (incluido el presidente, Pedro Ballvíé), mientras que Shuanghui nombrará a los tres restantes, entre ellos el vicepresidente.
Sigma y Shuanghui alcanzaron tambiíén acuerdos en materia de futuras oportunidades de negocio, así como en mecanismos para la resolución de conflictos entre accionistas que son habituales en este tipo de acuerdos.
Así, decidieron modificar el precio de la oferta desde los 6,8 euros ofrecidos hasta 6,9 euros por acción, lo que implica un trato más favorable para los accionistas.