Más de 71 operaciones han cerrado los inversores, nacionales y, sobre todo, internacionales, durante el pasado año en el mercado inmobiliario español
En total, la inversión en inmuebles no residenciales superó los 2.896 millones de euros, según Deloitte Real Estate, un 39% más que el año anterior. El aumento de la inversión en este mercado se debe, principalmente, a las compras cerradas por inversores internacionales en el segundo semestre de 2013. La mejora de la economía española, como la bajada de la prima de riesgo y el cierre del rescate bancario, y la puesta en marcha de Sareb, han situado de nuevo el mercado español en la órbita de los grandes inversores inmobiliarios. Así, España se sitúa como el tercer destino más atractivo entre los países europeos para los inversores, según una encuesta de Knight Frank a 200 inversores. En estos 3.000 millones de inversión se incluyen compras de edificios de oficinas, locales comerciales, hoteles y naves logísticas pero no activos residenciales, con lo que a esta cifra habría que sumarle las ventas de Sareb, cuyos lotes traspasados incluían críéditos (Bermuda, íbacus y Elora), viviendas y suelos residenciales (Bull). Los ingresos obtenidos por las operaciones de Sareb, incluyendo los lotes, recobros, alquileres y venta de pisos a particulares e ingresos financieros, ascendieron a 2.000 millones de euros. En 2013, la inversión directa en inmuebles ha sido de 4.100 millones de euros un 86% más que el año anterior, situándose en niveles de 2008, según Aguirre New-man. A esta cifra habría que sumar los 1.889 millones de las ventas de las plataformas inmobiliarias de bancos. Comercial Por tipología de activos, y como ya ocurrió en 2012, los inmuebles comerciales (edificios, locales y centros) han acaparado el 55% de la inversión, unos 856 millones según Deloitte, un 135% más que el año anterior. Por número de operaciones, tambiíén se ha duplicado la cifra: 12 ventas frente a seis de 2012. Entre las transacciones de mayor volumen destacan la compra del centro Parque Principado, en Asturias, adelantada por EXPANSIí“N en agosto. El fondo británico Intu Capital aterrizaba en el mercado español comprando el activo a Sonae Sierra y CBRE Global Investors por 162 millones. Además de centros tambiíén ha habido interíés por locales y edificios de uso comercial. Es el caso de los dos edificios vendidos por El Corte Inglíés, por 100 millones y 50 millones, junto a la plaza de Cataluña, en Barcelona, y en la calle madrileña Preciados, respectivamente. «En el mercado comercial, hay una rentabilidad muy atractiva, de más del 10%», explica Javier García-Mateo, director de Real Estate de Deloitte. Como ocurrió ya el año anterior, los activos hoteleros y logísticos son los que menos volumen copan, 420 millones y 90 millones, respectivamente, frente a los 790 millones invertidos en oficinas, según Deloitte. No obstante, como nota positiva están las dos grandes operaciones de Blackstone. En el área hotelera, destaca la compra del Hotel W, conocido como Vela, por el fondo Qatari Diar, por 200 millones, que copa casi la mitad de la inversión total del mercado. Ya contabilizada en enero, tambiíén destaca la venta de Torre Agbar en Barcelona para la construcción de un hotel de la marca Hyatt.