Frente común de los empresarios nacionales y extranjeros contra la independencia de Cataluña. El presidente de CEOE, Juan Rosell, hasta ahora ambiguo al respecto, se ha mostrado en contra del proceso secesionista. "Sería un destrozo importante de las relaciones humanas y tambiíén un destrozo económico, tanto para los catalanes como para el resto de los españoles. La mayoría de los catalanes no nos queremos ir ni nos vamos a irâ€, ha asegurado en la jornada Diálogos de Internacionalización, organizada por DHL. "Vivimos en Europa y nos tenemos que sentir cada vez más europeos. La clave europea es decisiva para la situación de Cataluña. Es mucho mejor vivir juntosâ€, ha recalcado.
Unas palabras que fueron secundadas por otros sesenta directivos y empresarios residentes en Cataluña, la mayoría de ellos alemanes, que alertaron esta mañana sobre las “nefastas consecuencias†que tendría para la economía de Cataluña su independencia de España, ya que se quedaría fuera de la UE y es “dudoso†que pudiera mantener el euro como moneda. El documento, titulado “Declaración de Barcelonaâ€, alerta tambiíén “de los peligros de un fervor nacionalista, que en el último siglo ha traído sufrimientos inconmensurables sobre Europa y que tampoco traerá nada bueno para Cataluñaâ€.
Entre los firmantes, que han creado una plataforma llamada Catalunya sense Europa, no, está el consejero delegado de Basf España y máximo responsable de la actividad de esta empresa química en el sur de Europa, Erwin Rauhe, que ha avalado el documento a título particular.
El expresidente del Círculo de Directivos de Habla Alemana Albert Peters, que ha presentado el documento, ha asegurado que Croacia se independizó a principios de los 90 y ha tardado más de una díécada en entrar en la UE, y ha advertido que a Cataluña le podría pasar lo mismo. Otro de los firmantes, que ha participado en la rueda de prensa, es Gerhard Esser, exconsejero delegado de Thyssen Krupp Materials en España y Portugal y exvicepresidente de la Cámara de Comercio de Alemania.“Si Cataluña se separa de España ya no pertenecerá a la UE. Las negociaciones de adhesión durarían años y requerirían unanimidadâ€, asegura la declaración, que tambiíén subraya que “no existiría la financiación a travíés del BCEâ€.