Janet Yellen no ha podido empezar con mejor pie su andadura al frente de la Reserva Federal (Fed). Las primeras palabras de la sustituta de Ben Bernanke ante el Congreso de los Estados Unidos han sido muy bien recibidas por Wall Street, pues la bolsa neoyorkina ha cerrado una de sus mejores sesiones de lo que va de año gracias a la promesa de continuidad que Yellen ha hecho ante la nación.
En concreto, el Dow Jones ha un 1,22% y ha recuperado los 16.000 puntos, mientras que el S&P 500 se ha anotado un 1,11%, hasta 1.819 enteros, y el Nasdaq ha subido un 1,03%, hasta 4.191 puntos.
Además, el avance de hoy ha permitido al mercado estadounidense sumar cuatro jornadas consecutivas al alza, que se han saldado con rebotes del 3,5% para el Dow Jones, del 4% para el S&P 500, y del 4,5% para el Nasdaq en estos cuatro días. Esta sucesión de repuntes no sucedía en Wall Street desde el pasado mes de diciembre.
La nueva presidenta de la Fed ha prometido la "continuidad" de su mandato con el anterior ante el Congreso del país, lo que implica que seguirá con la misma política de retirada gradual de los estímulos monetarios que ya comenzó su antecesor en el cargo a finales del pasado año.
En este sentido, ha afirmado que la reducción del programa de compra de bonos por parte del organismo monetario será "comedida" si continúa la mejora del mercado laboral y la inflación vuelve a su objetivo a largo plazo del 2%.
En cuanto al mercado de trabajo, Yellen ha dejado claro que la recuperación que ya está registrando "deja de ser completa". En concreto, ha reconocido que la cifra de personas con un empleo de media jornada ha aumentado, "pero la Reserva Federal preferiría que el nivel de empleo a tiempo completo fuera más elevado".
De estas palabras se desprende que es improbable que acelere el ritmo del tapering, lo que eha gustado no sólo a Wall Street, sino tambiíén a los mercados de europeos, ya que las bolsas del Viejo Continente han finalizado la sesión con fuertes repuntes tras estas declaraciones.
En cuanto a la volatilidad que ha sacudido a los mercados financieros globales hace unos días debido a la debacle de las divisas emergentes, la presidenta del banco central norteamericano ha asegurado que el organismo ha observado "muy de cerca" todo lo que ha ocurrido y que su postura acerca de ello es que no supone un "riesgo sustancial" para las previsiones de la economía estadounidense.
La deuda repunta hasta el 2,72%
En el mercado de deuda, el ritmo ha sido opuesto al de la renta variable. El interíés del bono estadounidense a diez años ha repuntado hasta el 2,72%. Además, el euro sigue ganando posiciones al dólar y el cambio a estas horas se establece en 1,3640 unidades.
Por su parte, el crudo Texas, de referencia en Estados Unidos, ha cerrado la jornada con un descenso del 0,12%, lo que le ha hecho volver a perder el nivel de 100 dólares por barril que había recuperado por primera vez en 2014.