Cesce ha aprobado por cuenta del Estado una operación financiera en favor de Sacyr en Panamá que alcanza 420 millones de dólares (316 millones de euros según el cambio utilizado por la entidad), tal y como confirmaron ayer a EL MUNDO fuentes autorizadas.
El grupo Cesce, cuyo accionista mayoritario es el Estado, acepta así transformar el aval prestado en 2009 como fianza en una garantía financiera para que un consorcio de bancos acepte refinanciar anticipos recibidos por la constructora y para nuevos príéstamos. El objetivo es que Sacyr, junto a sus socios de Italia y Bíélgica, logre liquidez suficiente para poder terminar una obra que ha generado cuantiosos sobrecostes y dañado la imagen del país.
Las fuentes autorizadas próximas a Cesce confirman de esta manera lo avanzado por este diario el pasado sábado y desglosan así el riesgo. Por un lado, Cesce avala con 170 millones de dólares la refinanciación de anticipos de Panamá que ya no deberán ser devueltos este año sino en cuatro años. Por otro, Cesce cubre a Sacyr en nuevos príéstamos por valor de los 250 millones de dólares restantes.
Las citadas fuentes aseguran que el Estado no ha aumentado su riesgo en la operación, pese a que los 420 millones de dólares reconocidos superan las cifras conocidas hasta ahora. De hecho, el Tribunal de Cuentas en su informe aprobado el pasado año, sólo mencionaba los 170 millones avalados como fianza ante la aseguradora Zurich. Las fuentes justifican la existencia de otros 250 millones por otros avales concedidos en su día para financiar a la empresa española que obtuvo la adjudicación de la obra en 2009.
Si no acaba la obra, Panamá se quedará con la fianza
«No hay coste adicional y la alternativa aprobada es mejor escenario que el de ruptura del acuerdo», aseguran. En caso de que Sacyr no acabara la obra, Panamá se quedaría con la fianza del Estado español y la utilizaría en contratar a un grupo posiblemente estadounidense, argumentan. «Intentamos lo mejor para el contribuyente, pero estamos condicionados por el pasado», afirman por su parte fuentes gubernamentales.
El riesgo es si surgen nuevas dificultades y Sacyr no logra terminar la obra teniendo además en cuenta la delicada situación financiera de la constructora. Según las fuentes autorizadas, Sacyr se compromete con Cesce a ir reduciendo su deuda con lo que vaya obteniendo de su litigio con la Autoridad del Canal de Panamá (ACP).
Uno de los tíérminos del acuerdo es que los más de 1.000 millones de dólares de sobrecoste que reclama el consorcio liderado por Sacyr sean dirimidos por las instancias de arbitraje. La constructora espera ganar el pleito tras las primeras opiniones favorables emitidas por el presidente del tribunal de arbitraje, el británico Peter Chapman.
Sacyr subió ayer un 4,31% en Bolsa de este jueves, despuíés de que el consorcio alcanzara un acuerdo «parcial» con la ACP que permite reanudar las obras de ampliación de esta infraestructura, paralizadas desde el pasado 5 de febrero.
Los títulos de la compañía que preside Manuel Manrique recuperaron de nuevo la cota de los 4 euros por acción, dado que cerraron a 4,113 euros por título, su precio máximo desde octubre de 2013. En lo que va de año acumula una revalorización del 9,3%.
Se retoman las obras al 40% de actividad
> La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) confirmó ayer que las obras de ampliación volvieron a reactivarse, si bien calcularó que se hizo en torno al 40% de su ritmo habitual.
>La ACP aseguró que se encargará de verificar que efectivamente se vuelven a poner en marcha todos los trabajos, que estaban parados por falta de liquidez desde el 5 de febrero.
>Según el acuerdo «parcial» alcanzado entre la ACP y Sacyr, cuando la obra se retomase se abonaría al consorcio unos 26,8 millones de euros por los trabajos facturados de diciembre.
