Repsol recibió ayer una alegría por partida doble. El ministro de Energía de Escocia, Fergus Ewing, anunció la concesión de dos licencias para construir los parques eólicos marinos de Moray Offshore Renewables y de Beatrice Offshore Wind- farm, que supondrán una inversión superior a los 7.000 millones de euros.
Según Marine Scotland, ambas compañías, participadas por Repsol, tienen previsto instalar 321 turbinas para alcanzar los 1.866 MW de potencia, lo que supondrá convertirlo en el tercer mayor parque eólico marino del mundo.
La construcción de estas concesiones se iniciará progresivamente entre 2016 y 2019, para su puesta en marcha definitiva en 2020. Además, según unas primeras estimaciones, se crearán 580 empleos directos y un total de 4.600 empleos durante la construcción.
2.000 millones de inversión
La participación de Repsol en ambos consorcios le supondrá un desembolso cercano a los 2.000 millones de euros. De hecho, estos desembolsos ni siquiera forman parte del plan estratíégico en estos momentos, ya que apenas hay detalles del área de Nuevas Energías y podrían incluirse en una próxima revisión que haga la petrolera.
La instalación cubrirá un área de 114 millas cuadradas (296 kilómetros cuadrados), lo que supone una superficie tan extensa como la ciudad de Edimburgo y es capaz de generar energía suficiente para abastecer hasta a un millón de hogares.
EDP y Repsol explicaron ayer que desarrollarán un primer parque en Moray (1.166 MW), que se dividirán en tres zonas: Telford, Stevenson y MacColl.
La promotora será la alianza creada en 2009 entre EDP Renewables (67%) y Sea Energy Renewables (33%), compañía adquirida hace tres años por Repsol. La instalación se construirá a 13 millas de la costa (22 km), en la costa de Caithness y evitará la emisión anual a la atmósfera de entre 3,5 y 4,5 millones de toneladas de dióxido de carbono. Según los actuales precios de mercado, cada megavatio instalado en alta mar cuesta más de 3 millones de euros.
La otra área aprobada es la de Beatrice, en la que participará con Scottish and Southern Energy ( 75%) y Repsol (25%). La promotora considera que se necesitará una inversión de 3.000 millones de libras ( 3.588 millones de euros).
El sitio está a unos 11 kilometros al noreste de la primera promoción de parques eólicos en aguas profundas del mundo y se utilizará la turbina propiedad de Talisman y SSE, que ha estado en funcionamiento desde 2007.
Repsol desarrolla tambiíén otro proyecto eólico en Inch Cape, en la que la petrolera participará con un 51%, mientras que EDP ostentará el 49% restante. Este proyecto, no obstante, todavía no ha recibido el visto bueno del Gobierno.
El proyecto es el primero en obtener el permiso de planificación de los 32.200 megavatios de parques eólicos propuestos que obtuvieron licencias en la tercera ronda realizada por el Gobierno de Reino Unido en 2010. Esta licitación pretende avanzar en los objetivos medioambientales fijados para 2020. El país cuenta con unos 2.000 megavatios de potencia eólica instalada marina en el mar y pretende alcanzar los 18.000 megavatios a finales de esta díécada.