Nueva ofensiva por Deoleo. El Ministerio de Agricultura se está movilizando para evitar que la compañía española, líder mundial en el sector del aceite, pueda acabar en manos del Fondo Strategico Italiano (FSI), que va a presentar una oferta por la dueña de Koipe y Carbonell junto a Qatar Holding.
El fondo soberano controlado por el Gobierno de Roma y el brazo inversor del país árabe, presente ya en Iberdrola con una participación de casi el 10% del capital, quieren quedarse con el 31,38% de Deoleo que tienen a la venta Bankia, Caixabank, BMN y Kutxa. Es un paquete que está valorado en bolsa en 148 millones de euros, pero que obligaría a lanzar despuíés una opa sobre la totalidad.
El plazo para la presentación de ofertas vinculantes vence el próximo miíércoles 2 de abril y será a partir de entonces cuando JP Morgan, el banco que tiene el mandato para la colocación de este paquete accionarial, haga una primera criba.
El FSI y Qatar presentarán su propuesta a travíés de IQ Made in Italy Investment Company, un vehículo inversor creado en 2013 para invertir en compañías de alimentación, moda, turismo y lujo bajo el sello italiano y que cuenta con unos recursos financieros de 2.000 millones de euros.
Búsqueda de inversores
Ante este movimiento, y ante el temor de que italianos y qataríes pueden acabar vendiendo a nivel mundial aceite español bajo marcas del país transalpino, el Gobierno está dispuesto a que la Sepi entre en el capital, aunque, según confirman fuentes próximas a la operación, se están buscando tambiíén otros inversores, fundamentalmente españoles, que pudieran ir de la mano. "Lo que se está estudiando hacer con Deoleo es similar a lo que ocurrió ya el pasado mes de agosto en Indra, cuando la Sepi se quedó el 20 por ciento de la compañía que vendió Bankia", aseguran las fuentes consultadas por este periódico.
De hecho, la idea pasa porque la Sepi se quede con alrededor del 20% tambiíén en Deoleo y vender el 11,38% restante a un tercero, con lo que se esquivaría la obligatoriedad de tener que lanzar una opa sobre el cien por cien. Al margen de Italia y Qatar, el resto de interesados en Deoleo son el gigante estadounidense Bunge y los fondos de capital riesgo PAI, Carlyle, CVC, y Rhí´ne, una gestora creada por el inversor italoamericano Robert Frank Agostinelli, muy cercano a Josíé María Aznar.
De acuerdo con las fuentes consultadas, cualquier inversión que no fuera la del Estado italiano sería bien recibida por el Gobierno, porque supondría además un espaldarazo a la inversión extranjera. En ese caso, lo más probable es que la Sepi no tuviera necesidad de entrar en el accionariado.