Los grandes inversores extranjeros volvieron a confiar en la deuda soberana de España en el mes de febrero, cuando adquirieron 1.915 millones, hasta los 295.282 millones en total, según los datos de cartera registrada publicados ayer. La cartera registrada es la cartera a vencimiento ajustada de operaciones temporales, como las repos. La cifra roza los máximos absolutos marcados el pasado diciembre, cuando alcanzaron los 298.139 millones.
El análisis en tíérminos relativos no es, sin embargo, tan favorable, puesto que ahora los inversores extranjeros controlan el 42,4% del total de la deuda estatal, apenas 1,5 puntos menos que a cierre de diciembre. Antes de la crisis, en 2010, rozaban el 55%, bien el porcentaje que bajó hasta un 36% en 2012.
Los bancos españoles, mientras, mantuvieron en febrero su inversión en deuda soberana con una leve variación al alza de 140 millones que deja su porcentaje en el 29.57%, cuatro díécimas menos que el mes anterior, porque el total de deuda ha crecido. La banca ha aumentado dos puntos porcentuales sus tenencias de deuda sobre el cierre de 2013 porque a partir de verano aprovechó para vender la deuda que compró en las peores fases de la crisis (algo que arregló las debilitadas cuentas del resultados del sector) y porque, además, en diciembre se deshizo de bonos del Estado para que íéstos no se reflejasen en los test de estríés, realizados con datos de cierre de año.
Así, entre agosto y diciembre la banca vendió más de 35.000 millones en bonos, un 15% del total. En enero volvió a comprar la mitad de esta cantidad, unos 17.000 millones de euros. Los extranjeros, como principal inversor en deuda española, han comprado cuando la banca ha vendido (de ahí el máximo de diciembre) y vendido cuando la banca ha comprado.
Tomando plazos más largos, sí se aprecia cómo la mejora del sentimiento sobre España ha permitido que la banca compre a menor ritmo (10.000 millones en 12 meses) y que los extranjeros metan 50.000 millones en deuda, subiendo cinco puntos porcentuales su participación en las tenencias de deuda. Desde agosto de 2012, los inversores foráneos han comprado deuda soberana española por más de 103.000 millones, según las estadísticas publicadas ayer por el organismo de financiación del Estado.
Así, la rentabilidad de la deuda a corto plazo, como los bonos a 2 y 5 años, está en mínimos históricos. El 10 años está en niveles de octubre de 2005 y muy cerca del ríécord –por lo bajo– del 3% de septiembre de ese año. La rentabilidad del bono a 10 años concluyó febrero en el 3,5%, y marzo en el 3,2%. El mercado espera además que el Tesoro estrene en breve un nuevo bono a 50 años, como anunció el secretario general del Tesoro, íñigo Fernández de Mesa, el pasado lunes 31 de marzo en una entrevista publicada por CincoDías.
