No hay dos sin tres. El constructor Juan Miguel Villar Mir ha cerrado con Agbar su tridente de socios catalanes. Despuíés de haber entrado en el capital de Abertis y de convertirse en el socio de referencia de Colonial, aparece ahora el grupo Agbar como nuevo aliado del veterano empresario madrileño.
En el caso de Agbar, la asociación ha llegado vía OHL, la constructora de los Villar Mir. Ambos han ganado uno de los mayores contratos de obra pública de este año en España, la primera fase de la ampliación del Canal de Navarra, un proyecto cuantificado en 147 millones de euros.
OHL y Agbar hicieron una oferta por debajo del 25% del precio de licitación, imponiíéndose a un consorcio formado por Acciona y ACS. El proyecto ha de servir para construir un ramal de 21,3 kilómetros entre Artajona y Lerín, y transformar en regadío 15.275 hectáreas de las riberas del Arga y el Ega.
Según el Gobierno de Navarra, esta ampliación del Canal supondrá para el ejecutivo de la Comunidad Foral un ahorro de 2,8 millones de euros anuales en el canon de concesión.
Llega Piquíé
Pero más allá de la importancia de la obra, la alianza con Agbar muestra cómo en los últimos años todos los planes de expansión del grupo Villar Mir pasan por Barcelona. Tanto que, incluso, el nuevo consejero delegado de OHL es un catalán tan notable como el exministro de Exteriores Josep Piquíé.
Piquíé llegó a OHL en otoño de 2013, cuando dejó la presidencia de Vueling. Pero la apuesta catalana de Villar Mir empezó antes, en 2012, cuando pactó una compleja entrada en el capital de Abertis como sustituto de ACS, ya que su presidente, Florentino Píérez, estaba de salida en la concesionaria.
Dos años despuíés, la jugada le ha salido redonda a OHL: tiene el 18,9% de Abertis, al que ha colocado un importante volumen de activos de autopistas de Brasil y Chile, y la acción de la constructora se ha disparado desde entonces un 49%, cotizando en la actualidad por encima de los 31,7 euros.
El papel de La Caixa
El papel de La Caixa no es casual. El desembarco en Abertis se ha hecho con la connivencia de la entidad catalana, que tiene el 22,4% de la empresa concesionaria y controla la gestión de la misma.
La Caixa tambiíén es socia de Agbar, donde mantiene el 24,3% de las acciones y que ahora es el nuevo aliado de OHL para entrar en el sector de infraestructuras vinculadas al agua.
La operación de Colonial
Entre la entrada de Abertis y la alianza con Agbar, Villar Mir diseñó una ‘operación imposible’: el rescate de Inmobiliaria Colonial, una promotora que debía más de 2.000 millones pero que contaba con un interesante y atractivo parque de oficinas en alquiler, además de una filial francesa, SFL, de la que posee el 58% del capital.
Pese a lo dificultoso de la operación, a travíés de la Inmobiliaria Espacio y al margen de OHL, ha comprado el 24% de Colonial por 300 millones y ha conseguido impulsar una ampliación de capital, una importante reducción del endeudamiento, mantener el control sobre SFL y el apoyo de inversores internacionales como el fondo Qatar Investment Authority.
Una vez más, está la sombra de La Caixa. Es cierto que la entidad de ahorro sólo tenía en la última íépoca el 5,7% de Colonial, pero había sido la entidad impulsora de esta promotora. Su salida de la inmobiliaria se llevó a cabo de manera que no perjudicase la entrada de Villar Mir y la operación para constituir la nueva estructura de capital de la compañía
