El Gobierno ha preparado toda una ofensiva a favor de los intereses de Estado y comerciales de España en los países del Golfo Píérsico a la que envía a varios ministros con el Rey al frente. En menos de dos meses y en tres viajes distintos, Don Juan Carlos visitará 6 países de la zona (Emiratos írabes, Kuwait, Omán, Baríéin, Arabia Saudí y Qatar) para apoyar las opciones de empresas nacionales, estatales y privadas, en grandes proyectos de infraestructuras, industriales y de Defensa.
El Ejecutivo vuelve a recurrir al peso e influencia que la figura del Rey tiene en el mundo árabe y donde es fundamental el apoyo e incluso la presencia personal del jefe del Estado antes de cerrar los concursos para todas las grandes inversiones y operaciones comerciales. El monarca aún se recupera de su última intervención quirúrgica y sigue con sus ejercicios de rehabilitación, aunque ya preside los actos oficiales.
En la primera etapa del primer viaje de esa ofensiva comercial, en Abu Dabi (Emiratos írabes), Ineco, empresa de ingeniería del consorcio estatal de la SEPI, se ha adjudicado junto con Aena el proyecto de puesta en marcha de la nueva terminal del aeropuerto internacional de la capital. La cuantía del contrato asciende a los 12,5 millones de euros, una cifra pequeña en comparación con los 6.000 millones de la gran obra que Emiratos írabes proyecta: el metro y el tren ligero para Abu Dabi, al que aspiran las grandes empresas constructoras españolas.
Además, Emiratos írabes tiene planes y programas de contratación para desarrollar, construir y explotar una red ferroviaria de mercancías y pasajeros de 1.200 kilómetros.
Don Juan Carlos visita Emiratos y Kuwait acompañado por cuatro ministros: Josíé Manuel García-Margallo (Asuntos Exteriores), Ana Pastor (Fomento), Pedro Moreníés (Defensa) y Josíé Manuel Soria (Industria) y los secretarios de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, y de Comercio, Jaime García-Legaz. Tambiíén acuden los presidentes o máximos representantes de las de empresas españolas con intereses en la zona como Abengoa, ACS, FCC, San Josíé, Navantia, Airbus, Isolux, Cepsa, Indra, Ineco, Aldeasa, Sener, Typsa o Tíécnicas Reunidas.
Además del desarrollo de grandes infraestructuras, los países del Golfo Píérsico objetivo de la ofensiva comercial del Gobierno tambiíén preparan grandes inversiones en seguridad y defensa. La empresa nacional Navantia, especializada en barcos de guerra, ha ofrecido sus modelos de fragatas y corbetas (en España BAM) tanto a Emiratos írabes, donde los concursos están en una fase muy inicial, como a Qatar, país que Don Juan Carlos visitará antes de dos meses. El gobierno catarí está a punto de adjudicar la construcción de 4 corbetas para su Marina de guerra, un programa en el que Navantia parte con ventaja y que supondría garantizar carga de trabajo para sus astilleros durante varios ejercicios.
El Rey continuará sus viajes a los países de la zona antes de que termine este mes de abril, en concreto a Omán y Baríéin. En mayo le llegará el turno a Arabia Saudí, donde sigue pendiente de adjudicación el gran concurso para dotar a sus Fuerzas Armadas de 250 carros de combate Leopard fabricados en España bajo patente alemana y cuyo coste alcanza unos 3.000 millones de euros.