EFE
El expresidente de Polonia Aleksander Kwasniweski, uno de los enviados de la Unión Europea a Ucrania que negoció la liberación de la ex primera ministra Yulia Timoshenko, rechazó hoy las críticas recibidas por sus vínculos con la mayor empresa de gas de ese país.
Kwasniewski, ministro en el último Gobierno comunista de Polonia y jefe de Estado entre 1995 y 2005, fue nombrado este año directivo de la empresa gasística Burisma Holdings, al igual que Hunter Biden, hijo del vicepresidente de Estados Unidos, según informa la propia página web de la compañía ucraniana.
La conexión de Kwasniewski y Biden con la empresa de gas ha suscitado dudas y críticas, cuando continua la escalada de la violencia en Ucrania y se mantienen las tensiones entre Occidente y Rusia, que controla el suministro de gas a Ucrania.
En declaraciones a la cadena de televisión TVP, Kwasniewski dijo hoy que no "nada incorrecto" en colaborar con Burisma" y defendió su actividad como "sumamente útil" para Ucrania.
Ayer el primer ministro de Polonia, el liberal de centro-derecha Donald Tusk, se refería a la vinculación de Kwasniewski con Burisma como "incómoda y ambigua", y reconocía que "no la ve bien".
Burisma, con sede legal en Chipre, opera en Ucrania desde 2002 y tiene acuerdos con varias compañías públicas locales.
Aleksander Kwasniewski, junto con el expresidente del Parlamento Europeo, Pat Cox, actuó como un enviado de la UE durante las negociaciones para liberar a la ex primera ministra de Ucrania Yulia Tymoshenko, que cumplía una condena de siete años por "abuso de poder" en la negociación de las tarifas del gas con Rusia en 2008