Las probabilidades de que el Banco Central Europeo (BCE) adopte nuevas medidas para combatir la amenaza "residual" de deflación, así como los riesgos de un periodo excesivamente prolongado de baja inflación se han incrementado "significativamente" de cara a la próxima reunión de junio de la institución, según ha indicado el representante luxemburguíés en el directorio del banco central, Yves Mersch.
"Las probabilidad de que el Consejo de Gobierno actúe ya en su próxima reunión de política monetaria en junio han aumentado significativamente", aseguró el banquero luxemburguíés en una conferencia pronunciada en Munich.
En este sentido, Mersch indicó que el instituto emisor de la zona euro dispone de herramientas para flexibilizar su política monetaria y apuntó que el BCE puede usar tanto medidas especiales como convencionales.
El ejecutivo del BCE señaló que no existen signos de deflación en la eurozona y las perspectivas de inflación en la región se encuentran firmemente ancladas sin que se aprecie un cambio en las decisiones de compra de los consumidores que, por otro lado, cada vez muestran un mayor grado de confianza en el futuro.
"Sin embargo, respecto al riesgo residual de deflación debemos al menos estar preparados", añadió Mersch. "Un periodo demasiado largo de inflación muy baja no debe dejarnos fríos pues existe el riesgo de que se desanclen las expectativas de inflación a largo plazo", añadió.