El próximo viernes 30 de mayo se cumplirán 90 días desde la colocación del primer paquete de acciones de Bankia pertenecientes al Gobierno. Se terminará entonces el periodo de lock-up al que se comprometió el FROB (el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria que ostenta la participación pública en la entidad nacionalizada) con los compradores de ese primer 7,5%. En la última presentación de resultados de Bankia, el director general de presidencia, Josíé Sevilla, reconocía que “los bancos de inversión están por arriba y por abajoâ€, pero remitía al FROB para disponer de detalles sobre cuándo y cómo se realizará la siguiente desinversión. Desde el organismo público no comentan nada de momento sobre esta operación, mientras que fuentes del ministerio de Economía se limitan a recordar que siempre están atentos al mercado.
Sevilla condicionó una nueva venta de acciones de Bankia al “cómo estíén los mercados, que es la variable claveâ€. El mercado ha enviado a las acciones de Bankia a niveles alejados de los 1,51 euros a los que se vendió el primer paquete. Hoy ha cerrado en los 1,4740 euros, a un 2,44% de esos 1,51 euros. Este lunes, los analistas del bróker suizo Credit Suisse situaban su precio objetivo aún más abajo, en los 1,30 euros.
Sin embargo, los precios objetivo que se le otorgan a Bankia varían mucho en función de la casa de análisis. De los más optimistas son los expertos de Banco Santander, que el 18 de febrero le otorgaron un precio de 1,79 euros, frente a los 1,28 anteriores. Diez días despuíés, el FROB vendía a 1,51 euros, valor que para los expertos de Bankinter es su precio objetivo. El pasado 10 de marzo, JP Morgan lo mejoraba de manera sustancial aunque por debajo de ese 1,51 euros a 1,34 euros desde 0,45, y unos días despuíés, Goldman Sachs, responsable escogido por el FROB para la estrategia de desinversión en la propia Bankia, le otorgaba la semana pasada un precio de 1,49 euros.
Además de la caída del precio de la acción respecto a la anterior colocación, el mercado está mucho más tranquilo ahora que a finales de febrero, en el sentido en que la euforia por la recuperación de España ha quedado eclipsada por otros asuntos europeos como las elecciones del domingo. Sin embargo, el precio de mercado de los títulos de la entidad nacionalizada no sería tan determinante si en el caso de la segunda colocación se optara por otro sistema distinto a la colocación acelerada. El secretario de Estado de Economía, Fernando Jimíénez Latorre, comentaba despuíés de la primera venta que ahora “hay más alternativas abiertas porque el valor es más líquidoâ€. Tras la primera venta, ahora sería más probable que sea un gran inversor u otra empresa la que se hiciera con un paquete relevante, opción que en la primera colocación se descartó porque el valor no disponía de liquidez y esa era la prioridad. Los procesos de accelerated bookbuilt offer, como el que se utilizó entonce son de hecho colocaciones rápidas que garantizan un precio mínimo y que suelen usarse cuando una compañía necesita financiar su deuda o liquidez.
Al cómo, se le añade el cuándo. Además de que el viernes 30 se levante el lock-up, las especulaciones apuntan a que el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, se convertirá tras las elecciones europeas y con la formación del nuevo Gobierno comunitario en presidente en exclusiva del Eurogrupo, un puesto de nueva creación y que el Partido Popular Europeo (PPE) habría prometido a España por su apoyo a la candidatura de Jean-Claude Juncker. La venta de un nuevo paquete de Bankia a un gran inversor sería una buena despedida. En una entrevista concedida a Cinco Días, Juncker asegura hoy que no ha prometido ningún puesto porque no tiene garantizado el suyo, pero sí ha reconocido que España está infrarrepresentada en las instituciones comunitarias.