El Fondo Monetario Internacional (FMI) urge a tomar medidas urgentes para evitar una nueva crisis inmobiliaria, dado que los precios de la vivienda están por encima de la media histórica en muchos países, sobre todo en emergentes como Filipinas, China y Brasil.
"Las herramientas para contener los precios de la vivienda aún están desarrollándose, pero eso no es una excusa para la inacción. Los precios de la vivienda en muchos países continúan estando muy por encima de la media histórica en relación con los salarios y los alquileres", ha avisado Min Zhu, subdirector gerente del Fondo, la semana pasada en el Bundesbank y publicado ahora por el FMI en su página web.
En opinión del FMI, la aceleración del precio de la vivienda desde niveles ya elevados es una de las mayores amenazas para la estabilidad de la economía global.
"La vivienda es un sector esencial de la economía, pero tambiíén una fuente de vulnerabilidades y crisis. Por tanto, mientras la reciente recuperación de los mercados inmobiliarios es un buen paso, debemos permanecer atentos para evitar otro nuevo 'boom' insostenible", indicó Zhu.
Según los datos del organismo, el precio de la vivienda crece más rápido en mercados emergentes, sobre todo en Filipinas (con subidas del 10% frente al año anterior), China (9%) o Brasil (7%).
Con la recesión global, los bancos centrales redujeron las tasas de interíés a mínimos históricos, lo que elevó los precios de las viviendas a niveles que, según el FMI, representan un riesgo significativo para economías tan diversas como las de Hong Kong e Israel.
Los precios de la vivienda están tambiíén por encima de su media histórica en países como Australia, Bíélgica, Canadá, Reino Unido, Noruega y Suecia.
En Canadá, el precio de la vivienda está un 33% por encima de su media histórica en relación con los salarios y un 87% respecto a los alquileres.
En Reino Unido esta proporción es el 27% en relación con los salarios y un 38% sobre el alquiler.
El mercado inmobiliario más barato del mundo es el de Japón, donde la vivienda cuesta un 41% menos que su media histórica en relación con los salarios y un 38% respecto a los alquileres.
En los países del sur de Europa más afectados por la crisis se registraron, por el contrario, caídas en el precio de la vivienda: un 7% en Grecia respecto a hace un año, un 6,6% en Italia y un 5% en España.