Si el Sepla goza de absoluto protagonismo como altavoz de los pilotos de Iberia, el personal de la filial de bajo coste Iberia Express va por otro camino y ese papel sindical lo desempeña el pequeño y joven sindicato UPPA. Nacido el año pasado como escisión del propio Sepla en Air Europa, la Unión Profesional de Pilotos de Aerolínea (UPPA) lleva semanas negociando el primer convenio en Iberia Express. El documento llegará dos años despuíés de que la aerolínea arrancara sus operaciones.
La aparición de la firma que dirige Fernando Candela, en marzo de 2012, abrió una brecha entre Iberia y el Sepla al entender este sindicato que la compañía trataba de segregar actividad a menores costes saltándose los pactos laborales. Llegaron duras huelgas a finales de 2011 y el establecimiento de un laudo, firmado por Jaime Montalvo, por el que se limitaba el crecimiento de la low cost en operaciones así como en la contratación de personal propio.
Con la paz laboral instalada ahora en Iberia, cuya dirección ha firmado convenios restrictivos con pilotos, tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) y personal de tierra, se ha acometido el diálogo en Express en busca del primer convenio de pilotos.
La plantilla de esta hermana menor de Iberia está formada por 103 pilotos, 230 tripulantes de cabina de pasajeros y 77 empleados en servicios centrales. La empresa carece de personal de servicios en tierra, prestados por la matriz.
Fuentes cercanas a las negociaciones aseguran que el Sepla ha hecho esfuerzos por crear una sección sindical en Iberia Express. Sin embargo, es el UPPA quien ha representado al centenar de pilotos en un proceso que está a punto de culminar. La firma del convenio es inminente y la presentación podría producirse a lo largo de esta semana.
UPPA, presidida por el comandante de Air Europa Juan Manuel Núñez, únicamente tenía presencia hasta ahora en la aerolínea del grupo Globalia. En su presentación, los promotores del colectivo ya afirmaba que no se buscaba fomentar una división que existía, al menos, en la aerolínea de Juan Josíé Hidalgo.
La primera asamblea general del sindicato tuvo lugar la semana pasada. En ella se planteó la política sindical del colectivo, se aprobó el reglamento de las secciones sindicales, en lo que parece indicar que existe un plan de expansión a otras aerolíneas, y se afrontó la actividad en Iberia Express.
Esta es la cuarta aerolínea en el aeropuerto de Barajas por número de operaciones, tras Iberia, Air Europa y Ryanair. Su flota de 15 aviones ha atendido a seis millones de viajeros desde el arranque de operaciones con más de 50.000 vuelos operados.
A raíz de los acuerdos entre Iberia y el Sepla, la filial puede crecer en diez aviones hasta 2017. El propio convenio firmado en Iberia impuso que Express, que hasta ahora se ha regido por el Estatuto de los Trabajadores, debía tener convenio antes del verano.
Ambas empresas funcionan con distintos certificados de operador aíéreo y tienen condiciones laborales distintas pese a los ajustes en Iberia. Lo que se mantiene entre ambas aerolíneas es un acuerdo para que los copilotos de la matriz puedan soltarse como pilotos en la low cost