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El número de personas sin empleo creció en Francia durante junio en nueve mil 400 nuevos casos y el flagelo afecta ya a tres millones 398 mil, según informaciones difundidas hoy.
Los datos del ministerio de Trabajo señalan que si se suma a quienes tienen un contrato a tiempo parcial, la cifra llega a cinco millones 43 mil, un hecho sin precedentes.
Con la sola excepción de octubre del año pasado, cuando se registró un retroceso inesperado, el fenómeno se mantiene en alza constante desde abril de 2011 y constituye una de las principales preocupaciones de la población.
El presidente Franí§ois Hollande había prometido comenzar a invertir la curva ascendente del paro antes de finalizar 2013, pero no logró cumplir este objetivo.
Varios programas aplicados por el gobierno para resolver la situación, como "Empleos del futuro" y "Contrato de generación", resultaron ineficaces.
Este año Hollande presentó un nuevo proyecto denominado Pacto de Responsabilidad, el cual consiste en ofrecer privilegios fiscales a los empresarios por 30 mil millones de euros de aquí al 2017, a cambio de crear nuevas fuentes de trabajo e invertir más en el país.
Esta semana el Parlamento aprobó el presupuesto rectificativo para el segundo semestre, donde están contenidas las primeras rebajas tributarias al sector privado que, si bien acepta estas ventajas, se opone a comprometerse con un número determinado de empleos.
Los principales sindicatos franceses criticaron este plan por considerarlo un regalo a los empleadores, sin ninguna garantía sobre el cumplimiento de sus obligaciones.
Especialistas consideran que el principal obstáculo para hacer retroceder el paro es el díébil incremento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
Para crear un número suficiente de puestos, este indicador debe crecer de manera sostenida al menos en 1,5 por ciento, algo bastante lejos en la actualidad.
La proyección oficial para 2014 es de un punto de alza del PIB, si bien la Comisión Europea y otras entidades lo sitúan en sólo siete díécimas.
