EFE
Nada se le resiste al timador. De los supuestos operarios del gas que defraudan cientos de euros a sus víctimas por unas revisiones no realizadas, ahora llega un nuevo fraude, más virtual, pero que desde hace dos meses comienza a pegar con fuerza: el del falso revisor de Windows.
Y aunque esta estafa se desarrolla en el ámbito de la tecnología y por telíéfono, el "modus operandi" cumple similitudes con el del falso revisor de la caldera, según explica el comandante jefe del Grupo de Delitos Telemáticos (GDT) de la Guardia Civil, í“scar de la Cruz.
Porque igual que hay gente que "pica" y no desconfía de un persona que acude a su vivienda e inspecciona el gas sin previo aviso, ya hay profesionales del timo que llaman a casa, convencen de que el sistema operativo está infectado de virus y que basta con seguir sus instrucciones para solucionar en unos minutos el supuesto problema.
De momento, estos estafadores, instalados en países de Europa del Este, Ucrania o Rusia, donde hay "buena cantera" de cibercriminales, solo trabajan en inglíés, lo que no ha impedido que caiga gente en su engaño, si bien De la Cruz les augura un íéxito mayor en cuanto comiencen a hacer llamadas en español.
¿Cómo es el anzuelo?
Pero, ¿cómo se lanza el anzuelo del timo del Windows? Lo primero y más sencillo, explica De la Cruz, es que estas redes se hacen con listados masivos de telíéfonos en el mercado ilegal. Con ellos pescan a sus víctimas e, incluso, llegan a manipular el número desde el que se hace la llamada para que aparezca una numeración más habitual y no levante sospechas. De esta forma, es más fácil que el "cliente" coja la llamada.
A partir de aquí, comienza la fase de la "ingeniería social", en la que el falso operario de Windows o Microsoft trata de dar críédito a la estafa con todo tipo de explicaciones a su interlocutor.
"Te explican que han detectado una infección en tu ordenador y los riesgos que conlleva", indica el comandante jefe del GDT. Lo hacen para que se crea de lleno que algo no funciona bien, el estafador conduce a una página del servidor que refleja una serie de comandos que supuestamente son el indicador del problema.
Superado este paso, continúa De la Cruz, el falso operario ofrece la solución. Basta con seguir e instalar un programa para que en unos minutos elimine el fallo, sin saber -y ahí viene el verdadero problema- que el usuario está a punto de darle "total acceso" a todo el equipo.
Ni más ni menos sus instrucciones conducen a la víctima a que se descargue un programa de los muchos que existen legalmente en Internet de "control remoto", es decir, a que otra persona pueda manejar el equipo desde otro dispositivo.
Abrir la puerta a las cuentas bancarias
El estafador puede pedir una pequeña cantidad de dinero por la "reparación" con una simple trasferencia on line que, al tener vigilado tu ordenador, le abrirá las puertas a las claves, es decir, a las cuentas bancarias.
Otros timadores prefieren emplear esta llave que, voluntariamente y sin percatarse, la víctima les ha "regalado" para instalar un virus y continuar otro tipo de estafas, como bloquear el equipo y pedirte dinero a cambio de repararlo.
De uno u otro modo, añade el jefe del grupo de delitos telemáticos de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, al caer en el engaño le han dado al delincuente vía libre a "muchas ideas y ninguna buena".
El timo "a priori" no tendría sentido, ya que Windows o Microsoft no tienen por quíé saber si un ordenador tiene un virus o no funciona correctamente, avisa De la Cruz, que destaca que el nivel tecnológico y de internet del usuario medio es "nulo".
Por eso, los investigadores aconsejan desconfiar de trabajadores de compañías de Internet o cualquier otro servicio electrónico que sin aviso prometan solucionar algún problema, sea por telíéfono o en casa. Si con todo alguien ha sido víctima, se debe denunciar y formatear inmediatamente el ordenador.