El tan anticipado informe de inflación al consumidor del jueves mostró que el índice de precios al consumidor general y básico se mantuvo sin cambios desde junio, lo que reforzó las apuestas entre los participantes del mercado de que la Reserva Federal retrasará más aumentos de tasas.
Sin embargo, los datos de inflación del productor más calientes de lo previsto el viernes jugó un aguafiestas para el apetito por el riesgo, con el índice de precios al productor general y básico de julio aumentando con respecto al mes anterior.
Aún así, el panorama general apunta a una desaceleración de la inflación, e incluso ha generado esperanzas de desinflación.
Existe un consenso creciente entre los comerciantes de que la Reserva Federal podrá ofrecer el llamado "aterrizaje suave".
