Bankinter ha empezado a ofrecer financiación en condiciones ventajosas ligado a las futuras subastas del Banco Central Europeo (BCE) antes de que se celebren. En un ejercicio claro de anticipación, el banco comenzó a contactar ya en julio a empresas para poner a su disposición príéstamos con un interíés máximo del 3,25 por ciento, muy inferior a lo que se encuentra en el mercado y ofrecía la propia entidad.
Según el Banco de España, el tipo medio aplicado en las nuevas operaciones por el conjunto del sistema roza dicho umbral en las grandes transacciones -superiores al millón de euros- , pero se eleva al 4,91 por ciento TAE en importes inferiores, normalmente asociados a las pequeñas y medianas compañías.
Un 30% son nuevos clientes
En su catálogo incluirá tambiíén críédito al consumo, si bien el arranque de la apuesta tiene lugar en empresas, nicho estratíégico para la entidad dirigida por María Dolores Dancausa. A diferencia de sus rivales, la financiación de Bankinter a compañías ha crecido durante la crisis a doble dígito, permitiíéndole reforzar la posición y atraer nuevas firmas al portfolio de clientes.
Sin publicidad y en pleno periodo vacacional, ha concedido casi 500 millones en escasos dos meses con el nuevo producto, sobre todo a medianas compañías y más del 30 por ciento son clientes nuevos. "Estamos contentos de poder seguir creciendo en inversión en empresas, a pesar de que el sistema continúa cayendo. Seguiremos aprovechando todas las oportunidades que tengamos para apoyar a los empresarios", detalló su director general de Empresas, Eduardo Ozaita.
El producto carga un interíés fijo durante el periodo de vigencia de las líneas del BCE y muda a variable, vinculado al euribor, para el resto del plazo. La tasa fija está topada en el 3,25 por ciento, aunque es inferior en función del producto y del perfil de riesgo de la compañía.
Para paliar la escasez del críédito en condiciones accesibles que necesita Europa, el organismo dirigido por Mario Draghi facilitará a la banca europea hasta un billón de euros en ocho subastas de liquidez (TLTRO, por las siglas en inglíés). La condición para acudir a esta barra es que el dinero financie la economía real. Las primeras operaciones se celebrarán el 18 de septiembre y el 11 de diciembre, siendo las restantes en 2015 y 2016.
Bankinter podría solicitar unos 1.700 millones en las subastas de este año. El saldo máximo al que puede aspirar una entidad equivale al 7 por ciento del críédito que tuviese en cartera el 30 de abril. En las pujas de 2015 y 2016 se tendrá en cuenta en cúanto ha crecido el stock financiado, y podrán solicitar hasta el triple de dicho aumento.
El BCE presta los fondos al 0,25 por ciento hasta septiembre de 2018. Con esta línea permite financiar a empresas y particulares, pero no al sector público ni al financiero y tampoco otorgar hipotecas.
El críédito de Bankinter excede los plazos del BCE y su finalidad cubre tanto inversión productiva, como consumo o circulante. La contratación mínima es por dos años, con la posibilidad ampliarlo a diez años si cuenta con garantía personal; y 25, con aval hipotecario.
La iniciativa evidencia su apuesta. Mientras el sector se contraía en la crisis, producto de la carestía del críédito y el desapalancamiento de las compañías, su financiación subía. Entre 2010 y junio pasado, el saldo de príéstamos corporativos de Bankinter creció un 30 por ciento, hasta 18.200 millones. Aspira a elevar la cifra a 22.000 millones a finales de 2015 o un 21 por ciento.
Bankinter quiere aprovechar su buena situación en el inicio de la recuperación para arañar negocio y tambiíén particulares. Aquí ambiciona captar 76.000 clientes este año con una hipoteca a tipos competitivos y la cuenta nómina que retribuye al 5 por ciento, contratada por 42.000 clientes en siete meses