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El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Vitor Constancio, consideró que la economía de la eurozona avanzará ligeramente en el tercer trimestre de este año, tras estancarse entre abril y junio.
"Anticipamos que despuíés del desliz del segundo trimestre, habrá un crecimiento positivo en el tercer trimestre, pero l crecimiento en todo el año estará por debajo del uno por ciento, que es muy pequeño", afirmó el directivo a la prensa tras participar en una reunión de ministros de Finanzas de la Unión Europea que se desarrolló en esta ciudad.
Según datos de la oficina europea de estadísticas, Eurostat, la economía en la euro zona continuó estancada durante el segundo trimestre de este año.
El producto interior bruto (PIB) de los 18 países que comparten la moneda única se mantuvo sin cambios frente al trimestre anterior, cuando creció a un ritmo del 0,2 por ciento.
En el conjunto de la Unión Europea, con sus 28 miembros, el PIB creció un 1,2 por ciento.
Constancio admitió, además, que en el BCE "estamos muy preocupados por la baja inflación, que está muy alejada de nuestros objetivos".
La combinación de bajos crecimiento e inflación crea un contexto de crecimiento nominal bajo, que aumenta el peso de la deuda tanto para los Gobiernos como el sector público, y que puede obstaculizar la recuperación, subrayó.
Resaltó que "no hay espacio para la complacencia" y alertó de la necesidad de implementar reformas dirigidas a estimular las inversiones, aumentar la productividad y el crecimiento.
