La primera semana tras la marcha de Francisco G. Paramíés de Bestinver, despuíés de una relación de 25 años, se ha saldado con una píérdida de un 10% ciento del patrimonio de la gestora, según fuentes del mercado. En concreto, entre los fondos de inversión y planes de pensiones que la firma tiene domiciliados en España y los de Luxemburgo suman una fuga de capital de 763 milones de euros, con lo que resta un total de 7.523 millones de euros de patrimonio en España.
Desglosado, la mayor parte del dinero que ha salido en España, una suma de 321 millones de euros, se debería, sorprendentemente, a reembolsos (que deben tributar a Hacienda). Mientras que otros 41 millones serían por traspasos externos a otros fondos de inversión y 13 millones de traspasos a fondos de pensiones ajenos. Con todo, el volumen de activos bajo gestión de Bestinver en España se habría reducido hasta 6.542 millones de euros, según estos datos.
En Luxemburgo, la salida de dinero que han tenido sus productos alcanzaría los 385 millones de euros. Una píérdida de dinero que se debería, en gran parte, a la marcha de inversores institucionales, que se habría producido de forma más abrupta que en España.
Casi no hay fuga de partícipes
Según fuentes del mercado, Bestinver cuenta actualmente con 73.008 partícipes, lo que supone tan solo un 2% menos de los que tenía antes de la hecatombe Paramíés. Lo que significa que la gestora habría tenido importantes salidas de dinero aunque concentrado en muy pocas manos. No obstante, la percepción dentro de la firma es que la primera ola ya habría pasado, es decir, lo peor.
Beltrán Lastra, gestor de J.P. Morgan desde hace 18 años, ha sido el fichaje de la gestora para suplir la marcha de Francisco Paramíés -aunque todavía está en trámites de salida de la firma y no se habría incorporado-. Pero fuentes del mercado apuntan a que no será el último. La firma estaría preparando futuras incorporaciones que no tardarán en materializarse, con el objetivo de desvincularse del personalismo que hasta ahora había simbolizado la figura de Paramíés.
La gestora quiere dejar atrás la etapa de autor, para mudar en una gestora de autores. En el seno de la compañía se hablaría de que quieren "una firma de estrellas, pero no de un gestor estrella". De esta manera, Bestinver espera evitar que en el futuro pueda salir dinero siguiendo la estela de un primer espada como el apodado Warren Buffett español.
De los más de 760 millones que se han esfumado del patrimonio gestionado por la firma, Bestinver habría dado prácticamente todo por perdido, al menos, por ahora. Sin embargo, parte de la nueva estrategia se basa en abrir la mano a una mayor tipología de productos para llegar a más clientes o para atender las peticiones de los que ya forman parte de la casa.
Entre esos nuevos horizontes de Bestinver está la renta fija, aunque sin renunciar al buque insignia que siempre ha capitaneado la gestora: el estilo de inversión value, al que no prevíén renunciar.
Bestinver no está en venta
Los nuevos fichajes que prepara la gestora no responderían a una intranquilidad en torno a la marcha de los dos primeras espadas de Paramíés, ílvaro Guzmán y Fernando Bernad, aunque la gestora no descartaría en círculos cercanos que ambos no vayan a seguir en un momento dado los pasos de Paramíés. Según ha podido saber elEconomista ambos han recibido elogios por parte de la dirección de la gestora por su dedicación en una semana de crisis como la pasada. Esas mismas fuentes apuntan tajantemente que Bestinver no está en venta, tras varios intentos en el pasado
