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Autor Tema: Evo Morales se proclama ganador de las elecciones en Bolivia  (Leído 101 veces)

Eguzki

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Evo Morales se proclama ganador de las elecciones en Bolivia
« en: Octubre 13, 2014, 08:53:18 am »
El presidente socialista Evo Morales se proclamó vencedor de las elecciones del domingo despuíés de que los sondeos a pie de urna le dieran una arrolladora victoria para un tercer mandato, en el que busca consolidar una bonanza marcada por una reducción de la pobreza y un creciente rol estatal en la economí­a.


Aunque aún no se conocí­an los primeros resultados oficiales, un sondeo de TV Unitel dio a Morales un 61 por ciento de los votos, frente a 24 por ciento de su rival Samuel Doria Medina. Otros dos estudios tambiíén le dieron la victoria con más del 60 por ciento de los sufragios.

"Este es el sentimiento de liberación de nuestros pueblos. ¿Hasta cuando seguir sometidos al imperio o al sistema capitalista? Este triunfo es un triunfo de los antiimperialistas y los anticolonialistas", dijo Morales desde el balcón del palacio presidencial de La Paz, vitoreado por centenares de simpatizantes y con fuegos artificiales de telón de fondo.

Si el recuento oficial confirma la victoria, el exsindicalista cocalero de 54 años se convertirí­a en el primer lí­der boliviano que gobernará tres perí­odos consecutivos, con un fuerte apoyo popular para seguir su "proceso de cambio", que lo ha llevado a nacionalizar firmas en sectores clave como hidrocarburos, telecomunicaciones y minerí­a.

"Aquí­ habí­a a debate dos programas, la nacionalización o la privatización. Con más de 60 por ciento ganó la nacionalización", aseguró con voz enronquecida Morales, que dedicó el triunfo al lí­der cubano Fidel Castro y a su difunto amigo el expresidente venezolano Hugo Chávez.

Las encuestas tambiíén mostraron que el Movimiento Al Socialismo (MAS) de Morales habrí­a revalidado su mayorí­a absoluta en la Asamblea Nacional y se habrí­a impuesto en ocho de nueve departamentos, incluyendo el oriental Santa Cruz que durante años fue bastión de la oposición.

"Yo (votíé) por el presidente Morales. No quiero que volvamos al pasado con esos candidatos de derecha", dijo Flavia Núñez, una oficinista de 50 años.

Sus electores parecieron premiar el í­mpetu económico que vive Bolivia desde que Morales asumió el cargo hace casi una díécada y cómo utilizó el auge de las materias primas para financiar populares programas sociales para los más desfavorecidos y obras públicas como carreteras, escuelas y canchas deportivas.

Trabajar por Bolivia

La oposición, que dispersó su voto al no lograr un pacto de unidad, trató de empañar su carisma con promesas de mantener los logros de su Gobierno y combatir la corrupción, el narcotráfico y el clientelismo en la administración pública. Pero no lograron calar en el electorado de un paí­s que fue sacudido durante díécadas por la inestabilidad polí­tica.

"Quiero decirle a nuestros opositores no hagan confrontación. ¡Vengan! Trabajemos por Bolivia", aseguró el presidente aimara, quien para esta campaña logró atraer a su causa a algunos grandes empresarios y antiguos adversarios polí­ticos.

Desde que asumió en 2006, la economí­a boliviana ha crecido a un promedio anual superior al 5 por ciento, gracias a los buenos precios del gas, principal producto de exportación de la nación andina. Pero pese al ingreso extraordinario que le permitió reducir la pobreza en 15 puntos a mí­nimos históricos, mantuvo la disciplina fiscal y un endeudamiento razonable.

Su discurso revolucionario llevó a Bolivia al club de paí­ses "antiimperialistas" que en el último decenio desafiaron la influencia de Washington, pero al mismo tiempo se ganó los elogios de Wall Street y el FMI por su manejo macroeconómico.

Sin embargo, Morales aún tiene muchos retos pendientes para un nuevo mandato de cinco años, que ha prometido serí­a el último.

El caos en la justicia, el deplorable estado de la salud pública y el auge de la criminalidad ligada al narcotráfico en el tercer mayor productor mundial de cocaí­na son temas urgentes. Y sus grandes promesas, como una central nuclear en el paí­s, se podrí­an ver amenazadas si siguen cayendo los precios de las materias primas de las que depende el presupuesto.