El precio del petróleo sigue cayendo. Los datos que evidencian una ralentización económica en todo el mundo y las consecuencias que eso tiene para el consumo energíético están lastrando al crudo, tanto al europeo Brent como al estadounidense Texas.
Este miíércoles han vuelto a cerrar con notables caídas, aunque han sido más fuertes en el caso del americano, ya que la publicación de los datos de reservas petrolíferas en Estados Unidos ha sido el desencadenante del retroceso.
El precio del Texas ha caído hasta 80 dólares el barril por primera vez desde junio de 2012 al depreciarse hoy un 2,3%, mientras que el Brent se ha contenido más y se ha dejado un 1,7%, hasta 84,7 dólares.
El Departamento de Energía de Estados Unidos ha anunciado esta tarde que las reservas de crudo subieron la pasada semana en 7,1 millones de barriles, hasta situarse en 377,7 millones. Este aumento supera con creces las perspectivas de los expertos, que esperaban que se incrementaran en tres millones.
De este modo, el precio del crudo da un nuevo paso atrás en el particular proceso de corrección que está sufriendo. Desde que comenzó el año, el Texas se ha depreciado un 18%, mientras que el Brent ha caído más de un 23%.
