La sequía que ha azotado España este año podría pasar factura a los consumidores de aceite de oliva. Así lo cree Oil World, una organización que se dedica a estudiar el mercado de los diferentes aceites para alimentación en el mundo, quien avisa que la producción mundial caerá más de un 20% en la cosecha de 2014-2015, hasta las 2,55 millones de toneladas, lo que podría encarecer el precio del aceite.
Sólo España produjo más de 1,7 millones de toneladas en la última cosecha que se recogió en 2014, y fuentes del sector que desean mantenerse en el anonimato destacan que la cosecha actual se reducirá hasta las 0,8 millones de toneladas, un descenso en torno al 50%. Oil World destaca que, además de la sequía, los olivos españoles producirán menos este año tras la elevada producción la temporada pasada.
Como se puede apreciar en el gráfico, el mercado ya ha empezado a traducir estas previsiones en subidas de precio: los contratos de futuro del aceite de oliva virgen han subido más de un 40% en lo que va de año, hasta superar los 2.500 euros por tonelada.
Un rápido avance que comenzó la pasada primavera -desde los mínimos del año el 16 de abril su precio se ha incrementado más de un 58%-. En este sentido Oil World destaca que los precios del aceite en España "tienen un fuerte potencial de subida durante los próximos meses a la espera de la confirmación del descenso de la producción este año".