EFE
El embajador de España en Panamá, Jesús Silva, ha concluido su misión para asumir la presidencia de la empresa pública española INECO, confirmó hoy a EFE el propio diplomático.
"Despuíés de cuatro años en Panamá, la ministra española de Fomento, Ana Pastor, me ha pedido que asuma la presidencia de INECO", confirmó Silva.
El diplomático abandonará este mismo fin de semana su puesto al frente de la embajada española en Panamá para hacerse cargo de su nueva responsabilidad.
INECO es una empresa de ingeniería dedicada al desarrollo de todo tipo de infraestructuras que depende directamente del ministerio de Fomento, dispone de un equipo de 2.500 personas y desarrolla diferentes proyectos en casi medio centenar de países.
Silva declaró a Efe que "precisamente Panamá es uno de los países donde INECO acometerá varios proyectos durante los próximos años".
Durante su reciente visita a España, el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, le solicitó directamente a Ana Pastor la colaboración de su ministerio para varios proyectos, "especialmente la gestión de residuos urbanos y la de las principales redes de abastecimiento y saneamiento de agua", agregó.
En líneas más generales, explicó Silva, INECO brindará asistencia tíécnica al gobierno de Varela para el desarrollo de su Plan de Inversión Pública a largo plazo en infraestructuras urbanas, para lo que abrirá una oficina tíécnica en Panamá.
"Todos los gobiernos disponen de un departamento dedicado a la ingeniería en administración pública, y en ese sector puedo decir sin falso chovinismo que España es líder", aseguró el embajador y designado presidente de INECO.
Jesús Silva, diplomático de carrera, ha cumplido cuatro años como embajador en Panamá, su segunda misión como cabeza de una representación diplomática despuíés de haber representado a España ante el gobierno de Jamaica.
"Durante estos años hemos visto cómo se han multiplicado la presencia y la inversión españolas en Panamá, como se han estrechado las relaciones entre ambos países y como la relación entre sus respectivos gobiernos ha alcanzado su mejor momento", consideró el diplomático.
Silva recordó el momento crítico este año de la crisis en la ampliación del canal de Panamá, en la que estaba involucrada la empresa española Sacyr, que junto a las otras que conforman el consorcio internacional GUPC, principal adjudicatario del proyecto, tuvo que paralizar las obras por falta de fondos a causa de sobrecostos que están en litigio.
Silva consideró que desde el inicio de esa crisis "los gobiernos de Panamá y España tuvieron muy claro que se trataba de un problema entre empresas y lejos de dañar sus relaciones ambos trabajaron conjuntamente para ayudar a encontrar una solución".
El embajador subrayó el trabajo en ese sentido que hizo la ministra española de Fomento junto al gobierno de Panamá.
"Lo importante ahora", una vez que las obras se reanudaron, "es que la ampliación concluya en los plazos previstos", añadió.
Antes de abandonar Panamá como embajador, Silva recibirá este viernes la Gran Cruz de la Orden de Vasco Núñez de Balboa, la máxima condecoración que se concede en este país