EFE
Alrededor de un centenar de empleados de servicios de limpieza, seguridad, cocina y mantenimiento protestaron en la sede de Apple para denunciar los bajos salarios que reciben y la brecha existente entre sus condiciones y las de los trabajadores de la empresa.
Estos trabajadores de servicios, en su mayoría hispanos, no mantienen un contrato directo con Apple, sino que están empleados por empresas especializadas que a su vez son contratadas por Apple, pero aún así los manifestantes reclamaron a la compañía que se implique para mejorar sus condiciones laborales.
"Estamos hoy aquí para luchar, bajo la lluvia, por la seguridad y la justicia en el trabajo. Nos maravillamos ante el crecimiento de la industria tecnológica, pero nosotros somos su base", dijo a los concentrados el reverendo afroamericano y activista Jesse Jackson.
Aunque contó con la presencia de Jackson como figura más visible, la protesta fue organizada por el sindicato SEIU, que lleva tiempo implicado en la defensa de los derechos de estos trabajadores en las empresas tecnológicas de Silicon Valley.
El centenar de empleados de servicios permaneció varios minutos a la intemperie bajo la intensa lluvia que cayó hoy en toda la zona de la Bahía de San Francisco como signo de protesta, para entrar despuíés en la sede de Apple al grito en español de "¡Sí, se puede!" y entregaron a un portavoz de la empresa una petición firmada por 20.000 personas en la que pidieron una mejora salarial.