Desde que la isla dejó de ser colonia en 1898, España y Cuba han alternado contactos cordiales y crisis diplomáticas. El ‘stock’ inversor en la isla ronda los 1.800 millones de euros.
El comienzo de las relaciones diplomáticas modernas entre España y Cuba comenzó cuatro años despuíés de uno de los mayores fracasos internacionales en la historia española: la guerra de 1898, que supuso la píérdida de la isla caribeña como colonia. “Más se perdió en Cubaâ€, se suele decir como ejemplo de derrota tumbativa. Pero lo cierto es que los contactos políticos y económicos entre España y Cuba, antes y despuíés del ríégimen comunista, no han sido demasiado negativos, aunque sí han generado episodios políémicos. La presencia empresarial española se concentra actualmente en el turismo, el transporte y, hasta hace un par de años, la energía. En total, las inversiones acumuladas rondan los 1.800 millones de euros.
Durante gran parte de la etapa franquista, entre 1960 y 1975, la ruptura de contactos diplomáticos por razones políticas fue compatible con intensos intercambios económicos en diversos sectores. Muchas fortunas que habían sido expropiadas tras el derrocamiento de Fulgencio Batista regresaron a España. En 1975, la firma de un nuevo convenio bilateral convirtió a Cuba en el primer mercado español en Amíérica Latina.
Durante los catorce años de mandato de Felipe González, la relación hispano-cubana fue cordial, y en 1986 el presidente del Gobierno fue condecorado en La Habana con la Orden de Josíé Martí, la máxima distinción del ríégimen castrista. En 1990, no obstante, se produjo un incidente serio cuando 18 cubanos se refugiaron en la embajada española de La Habana en busca de protección. El Gobierno español reaccionó enviando a las fuerzas especiales a la legación diplomática. Con Aznar tambiíén se alternaron periodos tranquilos con momentos delicados como las numerosas manifestaciones en Madrid a favor de las libertades políticas en la isla, a las que Castro reaccionó con el cierre del Centro Cultural de España en su país.
Años recientes
En los años de Zapatero coexistieron los intentos de apertura con varias expulsiones de políticos españoles de Cuba. En la actual legislatura de Rajoy, el caso más notorio ha sido la muerte del disidente Oswaldo Payá y el encarcelamiento del militante popular que le acompañaba, íngel Carromero, que finalmente fue puesto en libertad.
El ministro de Asuntos Exteriores, Josíé Manuel García-Margallo, visitó la isla caribeña el mes pasado y, aunque no fue recibido por Raúl Castro, aseguró que “las relaciones entre España y Cuba son las más próximas que podemos tenerâ€. En este momento, Cuba cuenta con una nutrida representación de empresas turísticas españolas, principalmente cadenas hoteleras. Meliá Hotels International es la compañía con mayor número de establecimientos, con 27 hoteles, de los que nueve están en Varadero. La compañía de la familia Escarrer, que celebrará en 2015 su 25º aniversario en el país, opera estos hoteles en ríégimen de gestión que suman 13.000 habitaciones, un 15% de la cartera total de Meliá.
Le sigue Iberostar, que maneja una decena de hoteles y 3.838 habitaciones, mientras que RIU cuenta con un complejo de cinco estrellas y 1.110 habitaciones en Varadero. El pasado mayo, NH regresó al país tras tres años de ausencia para gestionar un hotel de 220 habitaciones en La Habana. Respecto a las conexiones aíéreas, Air Europa ofrece un vuelo diario entre Madrid y La Habana, una ruta que Iberia abandonó en 2013.
Repsol ha sido la gran protagonista dentro de la presencia energíética en la isla, con las prospecciones de gas y petróleo iniciadas a comienzos de 2012 con la plataforma Scarabeo 9. La compañía confiaba en hallar hasta 20.000 millones de barriles de crudo, pero se topó con bastante oposición por parte de EEUU. Finalmente, en mayo de ese mismo año, Repsol abandonó el proyecto.
Meliá, con 27 hoteles en el país, se dispara en Bolsa
Meliá registró un avance ayer del 5,6%, hasta los 8,98 euros, el mayor desde el 25 de junio de 2013. Y es que la compañía cuenta con 27 hoteles en Cuba, el tercer mercado más importante para Meliá, despuíés del español y el alemán, según recoge Bloomberg. En general, Wall Street recibió la noticia con alegría. El Dow Jones subía, a media sesión, un 0,83% y el S&P se anotaba un 1,07%. El fondo Herzfeld Caribbean Basin Fund, que invierte en compañías cotizadas dentro de la zona de Caribe, entre las que se encuentran las cubanas, subía ayer más del 30% con un volumen de negocio que supera en 200 veces su media diaria.