Tres quintas partes de fondos de renta variable; otra parte de fondos de deuda corporativa. Para terminar, un toque de fondos de retorno absoluto. Y, voilá, así se obtiene el combinado perfecto de fondos de inversión para afrontar con tranquilidad un ejercicio 2015 en el que la volatilidad será la nota predominante en los mercados financieros. Claro que, cada ahorrador tiene sus propios gustos y necesidades, por lo que seis expertos han diseñado para Cinco Días tres carteras específicas en función de la aversión al riesgo de los inversores.
Una de las circunstancias clave a la hora de elaborar estas carteras es la firme apuesta por la renta variable, incluso para las personas menos proclives a arriesgar. “2015 será sin duda un año muy complicado para los perfiles más conservadoresâ€, explica Fíélix López, director de la gestora Atl Capital. “Este tipo de inversores históricamente ha encontrado la rentabilidad en activos con un bajo perfil de riesgo, como los fondos de mercado monetario o los de renta fija, siendo la inversión en renta variable totalmente residual, ya que no les hacía falta para conseguir buenos rendimientos. Hoy en día esto no existe y cuanto antes acepten este nuevo escenario, será mejor para ellosâ€, añade.
Esta circunstancia ha hecho que todos los gestores hayan aumentado el peso de los fondos que invierten en Bolsa dentro de sus carteras, incluso para los perfiles más conservadores. En cuanto a los mercados preferidos por los especialistas, destaca la renta variable europea, que podría verse impulsada por nuevas decisiones de política monetaria del BCE. Los gestores tambiíén eligen para sus combinados varios fondos de retorno absoluto, que buscan un objetivo de rentabilidad y volatilidad con independencia de lo que suceda en los mercados, así como fondos especializados en deuda empresarial híbrida, como los bonos convertibles, para arañar unas díécimas de rentabilidad sin asumir demasiados riesgos.
En cuanto a las apuestas más arriesgadas, algunos especialistas recomiendan añadir a las carteras fondos que invierten en Japón y en China, y alguno especializado en deuda corporativa de países emergentes.
Perfil conservador: la gran incógnita
Durante los últimos años, los inversores más conservadores tuvieron la suerte de conseguir jugosas rentabilidades en fondos de renta fija, fondos monetarios o fondepósitos, que comportaban un nivel de riesgo muy limitado. Sin embargo, la decidida actuación de los bancos centrales para reducir los tipos de interíés ha provocado fuertes correcciones de las primas de riesgo y ha restringido mucho las posibilidades de obtener rendimientos interesantes en este tipo de activos.
Llegados a este punto, los expertos llevan meses debatiendo quíé tipo de soluciones pueden ofrecer a aquellos clientes que quieren huir a toda cosa de cualquier tipo de píérdidas. Las soluciones son variadas: desde animarles a buscar depósitos hasta ofrecerles fondos que invierten en renta fija corporativa (donde aún hay algún margen de recorrido). La tónica general, no obstante, es la convicción de que es necesaria una labor pedagógica para que este tipo de inversores acepte tomar más riesgos en parte de sus carteras, para así lograr un mayor nivel de rentabilidad. En cuanto al rendimiento estimado para estas carteras, oscila entre el -2% y el 4%.
La firma de asesoramiento financiero Avantage Capital tiene claro que en el contexto actual de escasa inflación, los depósitos bancarios siguen siendo un buen elemento a añadir en las carteras más conservadoras. De hecho, para este tipo de ahorradores recomiendan destinar hasta un 75% de su capital disponible a imposiciones a plazo fijo. “En el entorno actual de tipos de interíés no recomendamos invertir en fondos de renta fija o mixtos porque la mayoría de carteras de renta fija va a generar en los próximos meses retornos negativos para los inversores, con rentabilidades inferiores a la comisión de gestión, o asumirán riesgos muy elevados de tipos de interíés o de críédito. Es preferible la discreta rentabilidad positiva de los depósitosâ€, explica Juan Gómez Bada, socio y director de inversiones de la firma.
Otros expertos sí que confían en los fondos de renta fija. Así, desde Tressis se opta por un combinado muy variado de productos especializados en deuda, que va desde fondos monetarios como el Amundi Fondtesoro, a fondos de bonos de empresas, como el Schroder Corporate Bonds, hasta un clásico: Carmignac Plus.
Eso sí, incluso para este perfil inversor recomiendan cerca de un 20% de la cartera en renta variable, con un mayor peso de Europa que de Estados Unidos. Desde Tressis tambiíén consideran positivo que las carteras conservadoras tengan una exposición a fondos de retorno absoluto (tambiíén denominados fondos de inversión alternativa), como Henderson Pan European Alpha o Old Mutual Gear.
Desde Andbank, además de apostar tambiíén por Carmignac Capital Plus –un fondo cuya seña de identidad es la preservación de capital–, tambiíén recomiendan a los inversores más prudentes varios fondos de renta fija mixta, como el Renta 4 Pegasus, el Ethna Aktiv o el DWS Alpha Renten. “Tambiíén consideramos interesante incluir productos menos direccionales en renta fija como el Threadneedle Credit Opportunitiesâ€, explica David Sánchez, analista de la firma.
Perfil moderado: más peso para la Bolsa
En aquellos casos en los que el inversor está dispuesto a asumir un mayor nivel de riesgo –para llegar a obtener unos rendimientos de entre el -3% y el 8%– la recomendación de todos los gestores es unívoca: aumentar la exposición a renta variable. “Para un perfil de inversor moderado apostamos por fondos que nos dan acceso a los mercados de renta variable global como el MFS Global Equity, aunque incrementamos el peso a la renta variable europea con el Invesco Pan European Equityâ€, comenta Fíélix López, de Atl Capital. “Para reducir el riesgo de la cartera, añadimos una apuesta de inversión alternativa en renta fija, con el Threadneedle Credit Opportunities y en renta variable, con el GLG European Alpha Alternativeâ€.
En el caso del cóctel propuesto por Profim para este perfil de inversor equilibrado, la base más estable estaría compuesta por Vontobel Fund Corporate Bond (10%) –un fondo de renta fija centrado en deuda de empresas europeas de primer y segundo nivel de solvencia– y Renta 4 Pegasus (10%) –un producto mixto defensivo, que busca obtener rentabilidades positivas, con independencia de la evolución de los mercados– y Carmignac Patrimoine –un fondo volcado en la preservación del valor–.
Para la parte más fuerte del combinado, optan por fondos de renta variable mundial, como el Robeco BP Global Premium Equity, productos enfocados en Bolsa europea, como el JPM Europe Equity Plus –uno de los productos predilectos para los gestores–, y un 10% de BNY Mellon S&P 500 Index Track, especializado en Bolsa norteamericana.
En el caso de Tressis, su combinado de fondos para este perfil recoge un 52% de apuesta por renta variable, un 38% de renta fija y un 10% de bonos convertibles (a travíés de Salar Fund, un producto especializado en el mercado de bonos convertibles). En cuanto a zonas geográficas, su apuesta principal es Europa, que acapara un 26% de la inversión total (a travíés de Henderson Euroland, Invesco Pan European y Alken Small Cap Europe, que busca sacar partido a la inversión en compañías de pequeño y mediano tamaño).
Perfil agresivo: búsqueda global
En el caso de las carteras diseñadas para los inversores menos aversos al riesgo, aquellos dispuestos a asumir varios trimestres en píérdidas en aras de adquirir activos que les reporten altas rentabilidades, la consigna para 2015 es clara: apostar casi todo a renta variable. El porcentaje destinado a Bolsa varía entre el 80% y el 90%, según el gestor, y la previsión de revalorización está entre el -8% y el 15%. El único debate en este caso es quíé proporción se destina al mercado europeo, quíé parte al mercado estadounidense y quíé parte a mercados emergentes o a otras ideas de inversión.
Para Gómez Bada, de Avantage Capital, “la elección de los fondos agresivos debe tener en cuenta tres aspectos fundamentales: una gestión enfocada al largo plazo, un alto grado de compromiso de quien toma las decisiones de inversión con el resultado del fondo, y una diversificación geográfica suficiente eligiendo las áreas con mayor potencial de crecimiento y seguridad jurídicaâ€.
En su caso, la cartera para el perfil decidido opta por dos productos de autor muy reconocidos en España, como Bestifond, el exitoso producto de renta variable europea de Bestinver, y Mutuafondo Valores, que ha rentado un 16,92% al año durante los tres últimos ejercicios. Como notas exóticas añade un 15% de Old Mutual Pacific Equity, que invierte fundamentalmente en Bolsas asiáticas, y SISF US Small & Mid Cap Equity (otro 15%), para estar posicionado en empresas de pequeña y mediana capitalización de Estados Unidos.
Tressis, por su parte, incluye un componente poco frecuente en su combinado, como es la inversión en renta fija en países emergentes, a travíés del fondo JPMorgan Emerging Markets Debt, para el que establece una ponderación del 10%. Este tipo de activos está en plena expansión, especialmente en Latinoamíérica, y se esperan rendimientos del 6% para 2015.
Esta firma tambiíén introduce inversión en renta variable de mercados emergentes –con M&G Global Emerging, que a día de hoy tiene una importante apuesta por empresas chinas, coreanas y brasileñas–, y Vontobel Global EM, que logró obtener el año pasado un rendimiento del 19% y en la última díécada ha rentado de media un 11,35% anual.
Por áreas geográficas, Europa es la que tiene más peso, con un 34% de la cartera invertida en Bolsa de esta región, frente al 25% de Estados Unidos. En su apuesta por España, tambiíén han escogido Mutuafondo España, con un 3% de la cartera.
En la búsqueda por ideas de inversión que logren batir a los mercados más tradicionales, la firma de asesoramiento Bull4All ha optado por posicionarse en fondos que invierten en bonos convertibles de Estados Unidos, como es el caso de Man Convertibles America, al que otorgan un peso del 15,48% del total de la inversión para el perfil de inversor más arriesgado. Además, tambiíén tratan de rentabilizar el tirón de la política monetaria expansiva de Japón por medio de Pictet Japanese Equity Opportunities, un fondo con una exitosa trayectoria en Bolsa nipona, y que en 2014 logró rentar un 9,9% y en 2013 un 24,1%.
Carlos de la Parra, analista financiero de Bull4All, considera importante mantener un porcentaje de la inversión en efectivo, para tener un margen de maniobra con el que operar en caso de que se presenten oportunidades interesantes.
Uno de los productos más repetidos por las diferentes casas de análisis para aquellas carteras agresivas es el Pictet Global Megatrend Selection, un tipo de fondo de inversión que busca oportunidades en las Bolsas de todo el mundo.
En el caso de Andbank, para los perfiles agresivos se decantan por fondos de renta variable global, como el MFS Global Equity y el Robeco Global Premium Equity. “Nos centramos en renta variable europea con el JP Morgan Europe Equity Plus y más concretamente en España con el Siitnedif Tordesillas Iberiaâ€, explica el analista David Sánchez. Para limitar la volatilidad, completan la mezcla con un fondo de renta fija global con sesgo a emergentes, el Templeton Global Total Return.