El programa de financiación del Tesoro Público para 2015, presentado por primera vez por la actual secretaria general del organismo, Rosa Sánchez-Yebra, trae varias novedades. Despuíés de un 2014 en el que el coste de emisión se redujo hasta el 1,52% y en el que la vida media de los títulos en circulación aumentó a 6,28 años, este año se presenta con cuatro puntos clave:
1. Emisión de 239.369 millones, un 0,8% menos
El Estado se enfrenta este año a unos elevados vencimientos, buena parte correspondiente a la concentración de emisiones a 3 años que realizó en 2012. Para ello, la emisión bruta de deuda será de 239.369 millones de euros, que pese a todo supone un ligero descenso del 0,8% menos respecto al año pasado, cuando la cifra alcanzó los 241.333 millones.
La emisión neta, el dinero adicional que captará una vez cubiertos los vencimientos, será de 55.000 millones, en línea con el año pasado. Esta cifra es superior a los 47.000 millones previstos hace unos meses debido a la financiación que asume el Estado de las comunidades autónomas. El montante neto se dividirá en 50.000 millones en emisiones a medio y largo plazo (frente a 66.054 de 2014) y 5.000 millones con letras (frente a los 10.400 millones que se amortizaron)
2. Cuatro subastas de bonos ligados a la inflación, una por trimestre
En 2014, el Tesoro estrenó una fórmula de financiación que emplean otros países europeos y que este año cobrará más importancia. Se trata de los bonos ligados a la inflación, un tipo de deuda donde el capital aportado evoluciona en función del índice de precios de la zona euro, aunque "el inversor nunca pierde el dinero invertido", como ha recordado Sánchez-Yebra. El Tesoro se ha propuesto lanzar al menos una subasta de este tipo por trimestre, pero sin marcarse ninguna cifra como objetivo.
En el calendario, ha fijado la posibilidad de emitir estos títulos en la primera subasta ordinaria de bonos de cada mes. Comunicará si incluye deuda indexada a la inflación en el momento en el que anuncie los objetivos de esa colocación habitual.
El organismo se reserva, además, la opción de emplear instrumentos complementarios como subastas en divisas distintas al euro, colocaciones privadas y subastas especiales.
3. El objetivo ya no será el máximo del rango fijado
Si en la próxima subasta el Tesoro no capta el máximo previsto no se podrá interpretar que no ha habido demanda. Sánchez-Yebra ha querido que cale este mensaje al explicar que hasta ahora la finalidad del organismo era obtener la cantidad alta del rango fijado, pero en 2015 el Tesoro no tendrá un objetivo tan ambicioso: la idea será adjudicar el importe medio del rango, permitiendo que la cifra pueda quedarse por debajo o superarse según las condiciones de mercado.
Sánchez-Yebra explicó está "en línea" a cómo actúan otros organismos homólogos en Europa y a cómo procedía el Tesoro antes de 2012.
4. Acogerá los príéstamos bancarios de las comunidades autónomas
Otra de las novedades de 2015 está relacionada con la financiación de las comunidades autónomas y ayuntamientos. El Tesoro ofrecerá hasta 39.869 millones de euros y, además, como ya adelantó en diciembre, su intención es subrogar todos los príéstamos bancarios de las comunidades, es decir, que el Estado pasaría a tener la titularidad de las deudas contraída con la banca mejorando así las condiciones. La secretaria del Tesoro ha asegurado que siguen las conversaciones con las entidades, sin revelar el montante total.