Ferrovial ha adquirido un dron con el fin de introducir esta nueva tecnología en la construcción de grandes infraestructuras y aprovechar las ventajas que aportan estos dispositivos en trabajos como los de topografía y seguimiento de las obras.
El grupo que preside Rafael del Pino se convierte de esta forma en pionero en la utilización de estos pequeños aviones no tripulados en el sector de la ingeniería civil, y en la primera constructora en solicitar una licencia de operador de drones.
Ferrovial enmarca esta iniciativa de su Departamento de Innovación en su apuesta por el impulso y el uso de las nuevas tecnologías y la introducción de los últimos avances tecnológicos.
Por el momento, la compañía está utilizando este dispositivo en su división de construcción. En concreto, lo emplea para tomar fotografías de los terrenos y las zonas donde se van a ejecutar las obras, con el fin de contar con información precisa y determinar posibles riesgos, y en el seguimiento de los trabajos de construcción.
En concreto, el dron de Ferrovial ha realizado trabajos de evolución y seguimiento en las obras de una de las autopistas que el grupo construye en Texas (Estados Unidos) y en otra de Irlanda. Tambiíén ha efectuado labores de topografía en el proyecto del hospital Nuestra Señora de la Salud de Granada.
En paralelo, Ferrovial está estudiando extender el uso de su dron a sus otras áreas de negocio, la de servicios y la de concesiones de infraestructuras. La empresa considera que este dispositivo puede supervisar el estado de las vías, con el fin de gestionar su conservación, o los contratos de mantenimiento de instalaciones y edificios de la división de servicios, entre otras funciones.
Ahorro y eficiencia
Ferrovial destaca que, además de apostar por las nuevas tecnologías, el uso de los drones en construcción le permite mejorar la eficiencia de los procesos constructivos. En concreto, reduce emisiones de CO2, mejora la seguridad en las obras y minimiza costes y tiempos de ejecución.
Los ahorros derivan del hecho de que el dron realiza tareas para las que hasta ahora era preciso movilizar una avioneta, un dispositivo más caro, que genera más emisiones, que emplea mayor tiempo en realizar el trabajo y con el que no se logran imágenes tan precisas como con los drones, capaces de volar a una menor altura, según explicaron fuentes de la compañía.
Asimismo, el empleo de drones disminuye el riesgo que presentan algunas licitaciones de obras en las que no se dispone de cartografía o es de baja precisión, dado que no se puede realizar un levantamiento usando topografía clásica debido a la orografía del terreno o a la inaccesibilidad de la zona, incluso para aeronaves. Ello redunda además en mejorar la seguridad de los trabajadores de la obra, al no tener que acceder a zonas de riesgo.
Además, estos dispositivos no tripulados permiten captar datos en tiempo real, que se pueden transportar con facilidad debido a su reducido peso y tamaño.