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Transportistas franceses contemplan hoy la posibilidad de continuar su huelga en demanda de mejoras laborales, tras el fracaso de las negociaciones con las organizaciones patronales.
Una de las principales demandas, el incremento salarial del cinco por ciento en lugar del uno o dos por ciento propuesto por los empleadores, resultó el punto más conflictivo del encuentro.
Tambiíén exigieron un aumento global del poder de compra de 100 euros por mes a partir de una revalorización del horario mínimo en 10 euros para las remuneraciones más bajas.
Abogaron por un díécimo tercer mes de salario y mejoras en la protección social.
La movilización comenzó el domingo a las 22:00 hora local, como lo habían anunciado desde diciembre pasado los sindicatos del sector. La misma provocó cientos de kilómetros de atascos en toda Francia.
La huelga, que sorprendió a los organizadores por su amplitud, provocó importantes perturbaciones en varias de las principales carreteras del país.
El transporte de mercancías por carretera, la logística y el transporte de viajeros en autobús, entre otros, estuvieron entre la ramas que participaron.
Fuentes sindicales recalcaron que el objetivo no era bloquear a la población, sino presionar a las organizaciones patronales que se reunieron la víspera con el fin de realizar las negociaciones planificadas para cada año.
Sin embargo, ante el fracaso del encuentro, los transportistas expresaron que podrían retomar la iniciativa en cualquier momento.
