Medio año despuíés de que en España se cambiara el sistema de facturación elíéctrica, abriendo la puerta a nuevas ofertas de luz, el Ministerio de Industria está detectando que los precios regulados siguen siendo más ventajosos para los usuarios que las tarifas del libre mercado.
Según datos internos que maneja Industria, a partir de las estadísticas y el seguimiento de ofertas que hace la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), las diferencias entre el precio regulado (denominado PVPC) y las mejores ofertas del mercado pueden oscilar entre el 1% y el 8%.
El Ministerio de Industria está siendo especialmente sensible con la evolución de las ofertas. Su deseo es que íéstas progresivamente sean más competitivas que el precio regulado, para impulsar la liberalización del mercado. De esta manera, se facilitaría el paso del grueso de los usuarios al libre mercado de forma voluntaria. Pero mes tras mes se observa que las tarifas reguladas siguen siendo mejores para el usuario.
Actualmente, el consumidor domíéstico tiene tres opciones para contratar su electricidad. Entre ellas sólo existen diferencias en el precio de la energía, ya que la parte regulada (peajes), es siempre la misma. La primera es la tarifa regulada, denominada Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC).
El precio de la energía se obtiene directamente del precio del mercado elíéctrico. Es un contrato sin letra pequeña ni servicios adicionales. En segundo lugar, el usuario puede acogerse a un precio fijo durante 12 meses.
Las comercializadoras de referencia, entre ellas Endeasa, Iberdrola y Gas Natura Fenosa, deben ofrecer un precio fijo de la energía durante 12 meses (el precio que libremente establezcan, pero fijo), con unas condiciones de contratación estándar, fácilmente comparables y sin servicios adicionales.
Y por último, está el precio libre. Se trata de un precio pactado libremente con una comercializadora de electricidad conforme a determinadas condiciones de revisión. En la mayoría de los casos se incluyen cláusulas especiales y servicios adicionales.
Consumidores tipo
El Gobierno está analizando de forma permanente la evolución entre esos tres modelos para diferentes consumidores tipo representativos. Por ejemplo, un consumidor con potencia contratada de 3,3 kW y consumo anual de 3.000 kWh (el de menor consumo), o un consumidor con una cierta potencia contratada de 4,4 kW y un consumo 3.900 kWh, que además tiene una segunda residencia con potencia 3,3 kW y consumo de 1.000 kWh.
Para todos los consumidores tipo considerados, el PVPC ha resultado más barato que la mejor oferta que podía encontrarse en el mercado para ese perfil (ver cuadro con algunos ejemplos). En la mayoría de los casos, la mejor oferta de todas las disponibles era la de Endesa Tarifa ONE Luz.
La conclusión del estudio es que el ahorro anual del PVPC frente a la oferta anual más barata del mercado oscila entre el 1,7% y el 8,6% de la factura, llegando a alcanzar los 67,9 euros anuales en el caso de un hogar con una familia tipo de cuatro miembros.