El diferencial sobre el Euribor ha pasado en un año de superar con holgura el 2% a situarse incluso por debajo del 1,5%
Prácticamente todas las entidades han reducido los intereses en los últimos dos meses. Las ofertas obligarán al cliente a tener una mayor vinculación con el banco
La aún incipiente recuperación del críédito ha abierto una batalla entre las entidades financieras para acaparar la mayor cuota posible. El resultado, de momento, es un abaratamiento de la oferta crediticia que, en el caso de las hipotecas, supera el 30%.
Prácticamente todos los bancos han actualizado las condiciones de sus productos, rebajando significativamente el diferencial que se aplica sobre el Euribor y apostando cada vez más por hipotecas a tipo fijo. Si hace un año la prima aplicada sobre el tipo de interíés de referencia superaba con holgura el 2%, ahora los nuevos príéstamos para financiar la compra de vivienda ofrecen diferenciales incluso inferiores al 1,50%. Según un estudio de la web especializada en ahorro Kelisto, este abaratamiento supone una rebaja de 462 euros en la cuota anual.
Banco Popular ha sido el último en sumarse a esta tendencia con una hipoteca ofertada a travíés de su filial online Oficina Directa, con un tipo de interíés que puede alcanzar hasta el Euribor más el 1,55%. Tambiíén esta semana BBVA ha comunicado a su red de oficinas la rebaja del diferencial en su hipoteca bonificada hasta el 1,60% sobre Euribor, en mínimos históricos en el 0,283%.
El año que acaba de empezar estará marcado por un entorno de bajos tipos de interíés que repercutirá inevitablemente en los márgenes de los bancos. Así que ganar volumen se antoja imprescindible para compensar la menor rentabilidad del activo. «El cambio de estrategia desde hace un año es palpable:antes las entidades eran mucho más selectivas a la hora de dar críédito, pero ahora es necesario captar el mayor volumen posible y eso sólo se consigue reduciendo los márgenes», coinciden varias fuentes del sector.
En esta nueva etapa confluyen varias circunstancias. Por un lado, los bancos comienzan a hacer frente a una oleada de vencimientos de críéditos concedidos en los primeros años del boom inmobiliario que hasta ahora aportaban ingresos al margen de intereses. Además, la cuenta de resultados de las entidades empezará a reflejar una caída de las dotaciones a provisiones y los recortes de plantilla acometidos durante los últimos años aliviarán el capítulo de gastos. «Habrá algo más de margen para competir en la oferta crediticia», sostienen en la patronal bancaria.
Santander tambiíén tiene previsto extender a otras comunidades autónomas el críédito hipotecario lanzado recientemente sólo en Cataluña, con interíés de Euribor + 1,65%. Bankinter, por su parte, quiere potenciar la venta de hipotecas con un diferencial del 1,70%: «Habrá una competencia enorme para dar críédito y nosotros vamos a pelear muestra cuota», dijo la consejera delegada del banco, María Dolores Dancausa.
En todo caso el críédito hipotecario no va a ser el gran generador de ingresos de los bancos. Aunque la actividad inmobiliaria empieza a repuntar -los últimos datos del INE, del pasado octubre, reflejan un aumento del 18% en el número de hipotecas constituidas- las nuevas contrataciones aún no superarán los vencimientos previstos, de alrededor del 6% del saldo total, es decir, más de 35.000 millones de euros.
«El volumen va a estar en el críédito al consumo y, sobre todo, a las pymes», destacan en una cotizada. Prueba de ello es que el ICO reducirá en un 35% la concesión de críédito en 2015 en previsión de que las entidades vuelvan a recuperar su actividad tradicional. Hay más argumentos: un informe de Citi esgrime que los príéstamos a pymes se convertirán en el activo más rentable de la banca, generando márgenes medios del 3,59%, gracias a que la financiación del BCE que ha reducido el coste de captación de recursos.
La tendencia del sector deja, no obstante, algunos «peros». El BCE constata en sus estadísticas que el coste de financiación en España dirigida a la adquisición de vivienda es aún superior a la media de la Eurozona (2,69% frente al 2,55%). Y obtener un príéstamo barato sólo será posible si el cliente acepta una cada vez mayor vinculación con la entidad, de modo que «se generalizará no sólo la contratación de seguros, sino tambiíén de tarjetas de críéditos y planes de pensiones», según apuntan en iAhorro.