Por... Ilsa Rodriguez
El Consejo de Estado de China anunció hoy que extenderá a todo el país 22 políticas preferenciales ensayadas en la Zona de Libre Comercio (ZLC) de Shanghai vinculadas a inversiones, comercio exterior, finanzas, servicios y supervisión gubernamental.
A estas se incorporarán seis medidas vinculadas a las aduanas y a partir del 30 de junio, cuando entrarán en vigor esas políticas preferenciales a nivel nacional, funcionarán 100 áreas especiales aduanales, agrega un comunicado divulgado en esta capital.
El documento precisa que esta expansión permitirá a inversionistas extranjeros hacer negocios en un amplio alcance con menos límites y restricciones, y subraya que las medidas que han sido exitosas en la ZLC de Shanghai pueden ser duplicadas en otras regiones del país.
El Gobierno, agrega, debe refrenar mucha intervención y dejar que las fuerzas del mercado desempeñen un papel decisivo.
Esta zona especial en la cosmopolita Shanghai comenzó a funcionar en septiembre de 2013 con la intención de probar una serie de reformas económicas como parte de las políticas de mayor apertura que llevan a cabo las autoridades locales.
En octubre pasado, el presidente Xi Jinping comparó los progresos reportados en esa ZLC con "semillas cultivadas en un campo experimental que pueden ser plantadas en otras tierras para que las flores se desarrollen" y anunció que esa experiencia podría ser replicadas en otras regiones chinas lo antes posible.
Con un área de 29 kilómetros cuadrados, en la ZLC de Shanghai se han establecido desde su inauguración más de 12 mil empresas y su comercio con el extranjero alcanzó los 121 mil 700 millones de dólares en su primer año de operaciones.
La Zona de Libre Comercio de Shanghai puso en práctica el libre comercio, la mayor apertura financiera y el poco control gubernamental en las actividades empresariales.