El sector del vino español en su conjunto, desde los vinos tranquilos a los espumosos, va camino de convertirse en el primer país exportador del mundo. Según los datos del Observatorio Español de los Mercados del Vino (OEM) las ventas en el exterior ascendieron en 2014 a 22,8 millones de hectolitros, el 22,3% más que un año antes. Sin embargo, mientras el volumen de ventas crece, los ingresos caen: un 2,28% interanual, hasta los 2.600 millones de euros. Entre las novedades del año destaca Francia: se ha convertido en el primer comprador de vinos españoles con 5,8 millones de hectolitros, lo que supone un incremento del 40%.
España ha multiplicado en 20 años por tres sus ventas de vino en el exterior, pero el precio medio de 2014 solo supera en un cíéntimo al de aquella fecha. Francia es ahora el primer cliente, por delante de Alemania (compró 3,6 millones de hectolitros), Portugal (2,3 millones), de Rusia (1,6 millones) e Italia (1,5 millones).
Francia importó en total 6,5 millones de hectolitros el año pasado. España, con sus 5,8 millones, es su principal proveedor. De ese total, 4,3 millones correspondieron a vinos a granel, a un precio medio de solo 0,35 euros litro. El resto, a productos envasados con y sin denominación de origen. Según las informaciones manejadas por el sector en España, una parte de esos vinos son reexportados desde el país vecino en forma de graneles o envasados. Otra parte se comercializa en el propio país como vinos antes llamados de mesa, que no tienen una denominación origen y simplemente se pueden vender indicando su procedencia de un país comunitario según la normativa. Y en el sector existen dudas sobre si los vinos españoles se mezclan o no con los franceses.
De todo el vino que exportó el año pasado España, 12,6 millones de hectolitros (el 55%) correspondieron a graneles, a un precio medio de solo 0,40 euros litro, frente a los 0,60 del año anterior. Supone un crecimiento de las ventas de este tipo de producto del 39%. Los vinos envasados ascendieron a 7,4 millones de hectolitros, el 5,3% más, lo mismo que crecieron los espumosos.
Vidal Matíé