El lujo asequible, como se define Tous, vuelve a generar atractivo entre los consumidores y entre los inversores. Varias firmas de capital riesgo se han interesado por comprar hasta un tercio del capital de la empresa de joyería catalana, que ha sido valorada en un máximo de 500 millones. Uno de los que más fuerte ha apostado es L Capital, la firma propiedad de Louis Vuitton Moet Hennesy (LVMH), el líder mundial del lujo en su máxima expresión.
El fondo de capital riesgo, dirigido por Julio Babecki, un reconocido exbanquero de inversión que trabajó en el propia Morgan Stanley, en Merrill Lynch y en BNP Paribas, es uno de los finalistas en la subasta que la familia manresana ha organizado bajo la intermediación de Morgan Stanley. Según distintas fuentes próximas al proceso, L Capital es el que ha presentado la mejor oferta por comprar hasta un 30% de Tous, que en el último ejercicio fiscal obtuvo un beneficio de explotación o ebitda próximo a los 40 millones de euros.
No obstante, la compañía de joyería y complementos espera para 2015 un aumento del beneficio operativo hasta los 50 millones de euros, lo que llevaría a una valoración de 500 millones. Por el contrario, algunos de los fondos que se han interesado por la empresa del osito consideran que no está justificado pagar más de 400 millones por una participación minoritaria en una empresa que ha tenido graves problemas con su expansión internacional y con el equipo gestor.
El interíés de L Capital responde al gran resultado obtenido por su última inversión en España, la compraventa de Pepe Jeans, recientemente adquirida por M1, un fondo propiedad de la familia Mikati, la más rica de Líbano. El fondo financiado por Louis Vuitton entró en 2010 al tomar el 12% del capital de la empresa de vaqueros por 35 millones de euros, participación que ahora ha sido valorada en cerca de 87 millones. Su anterior operación en España fue la entrada en Imaginarium, de la que salió en 2006 con jugosas plusvalías.
Una familia peculiar
Otro de los que han pujado por Tous es Bain Capital, que hace un par de años estuvo a punto de comprar un paquete mayoritario. Sin embargo, la operación, que tambiíén fue intermediada por Morgan Stanley, se vino abajo a última hora porque una de las hijas de los fundadores se echó atrás en el consejo de administración que tenía que aprobar la venta. Precisamente, la personalidad tan compleja de la familia, que ha cambiado en varias ocasiones al primer ejecutivo –Josíé Luís Manglano– y a los miembros independientes del consejo de administración –Josíé María Castellano– por discrepancias con la gestión, ha ahuyentado a varios private equities que estaban interesados en el negocio de Tous.
En la actualidad, la gestión de la firma está en manos de tres de las hijas –Rosa, Alba y Laura– de Salvador Tous y Rosa Oriol, con Josíé María Folache, ex de Carrefour y de El Corte Inglíés, como consejero delegado. En el consejo han entrado Beatriz González, exvicepresidenta ejecutiva de Hermí¨s, y Luis Bach (presidente del grupo de refrescos Orangina-Schweppes) como independientes, tras la salida de Luis del Valle (L’Oríéal España) y Andríés Cárdenas (Rodman y Bavaria).
El interíés por la moda española entre las firmas de capital riesgo se ha acrecentado en los últimos tiempos al calor de la mejoría de la economía local y de la aceptación de los diseños de las enseñas nacionales. Una de las pruebas de esta percepción fue la adquisición del 10% de Desigual por parte de Eurazeo, un fondo francíés que pagó 285 millones por esta participación minoritaria. La entrada se hizo a diez veces el ebitda, por lo que la famosa marca de camisetas se valoró en 2.850 millones.
La diferencia entre Desigual y Tous es que, mientras la primera ha crecido en ventas a un tasa del 29% en los últimos cuatros años, hasta alcanzar los 830 millones, la compañía del osito se ha estancado en algo más de 300 millones, lejos del objetivo de los 1.000 millones que anunciaron antes del estallido de la crisis. Al cierre de 2013, último ejercicio publicado, el Grupo Tous gestionaba 415 puntos de venta en 38 países y empleaba a 1.585 personas.
Agustín Marco