La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) adaptará su futura normativa de la fibra óptica en España a los requisitos que a buen seguro impondrá Bruselas a Orange para poder adquirir Jazztel. De esa forma, todas las miradas del regulador apuntan a la Comisión Europea, que en el mejor de los casos debería pronunciarse sobre la viabilidad del proceso de consolidación en suelo español el próximo 30 de abril.
Fuentes conocedoras de la situación aseguran a elEconomista que Bruselas podría exigir a Orange la apertura de su red de banda ancha fija (con ofertas mayoristas tanto de fibra como de ADSL) a otros competidores, dando origen a futuros operadores virtuales de fibra o ADSL. Esa condición podría remediar el riesgo competitivo que supone una concentración en el mercado español, ahora abocado a reducir el número final de grandes jugadores en el sector de cuatro a tres referencias tras la integración de Jazztel en Orange.
Si Bruselas impusiera a Orange España la creación de una oferta mayorista de banda ancha fija, todo invita a pensar que la CNMC actuaría en consecuencia respecto a las obligaciones mayoristas de Telefónica en el joven negocio de la fibra óptica. "No tendría sentido que el tercero de los jugadores estuviera obligado a abrir sus redes fijas y el líder destacado del negocio estuviera exento de ello", indican las fuentes consultadas.
Normativa española
Por lo pronto, la normativa española de la fibra óptica avanza con pies de plomo. El gobierno informó la semana pasada sobre la ampliación en tres meses del procedimiento de definición y análisis del mercado de banda ancha fija (mercados 3A, 3B y 4). De esa forma, la CNMC conocerá la actuación de Bruselas en el caso de Orange-Jazztel para obrar en consecuencia con la regulación sectorial.
Tal y como ya informó este periódico en su edición del pasado 13 de marzo, Bruselas podría dilatar aún más el procedimiento si percibiera "serias dudas" en el proyecto remitido por la CNMC. En ese caso, la Comisión Europea tendría que recabar más información de otros reguladores y organismos europeos sobre el impacto de la regulación española. En la actualidad, el regulador español ha dado por concluida la fase de consulta pública de la normativa y actualmente se encuentra en fase de análisis.
Según se desprende del primer borrador, la CNMC propuso obligar a Telefónica a ofrecer acceso al resto de operadores a su red de fibra óptica en todo el territorio excepto en nueve ciudades competitivas, donde se liberaliza el servicio: Madrid, Barcelona, Alcalá de Henares, Badalona, Coslada, Málaga, Móstoles, Sevilla y Valencia.
Antonio Lorenzo