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Expertos rusos urgieron a implementar una nueva política económica orientada a la diversificación y al desarrollo de un mercado y sistema financiero autónomos para revertir el estancamiento de la economía y propiciar un crecimiento sostenido.
Durante el debate de la plenaria dedicada a las prioridades en pos de un crecimiento industrial y la seguridad alimentaria, en la segunda jornada del Foro Económico de Moscú, analistas y acadíémicos coincidieron en la necesidad de una nueva política para potenciar otros sectores de la economía y reducir la dependencia de las materias primas.
Para el experto Valeri Fadeev, Rusia cuenta con condiciones para estimular el crecimiento industrial y económico, al mencionar los bajos precios del petróleo y la devaluación del rublo.
A su juicio, esos dos factores deben servir de catalizador para una nueva política económica y el desarrollo de mercados propios y un sistema financiero autónomo.
Dijo que deben cesar los pronósticos apocalípticos y plantearse grandes tareas y ambiciosos objetivos como demanda el país en las condiciones actuales.
El primer vicepresidente del Comitíé de la Duma estatal para asuntos de la industria, Vladimir Gutenev, concordó en que deben plantearse diagnósticos adecuados sobre la salud de la economía rusa.
Las perspectivas de la industria nacional pueden solo asociarse con la implementación del modelo de sustitución de importaciones orientadas a la exportación, bajo una efectiva dirección estatal, sostuvo Gutenev.
Llamó la atención el diputado y experto del reducido peso de las empresas innovadoras en la estructura económica.
Indicó que pese a que muchas personas se consagran a los inventos y descubrimientos científicos, no son tangibles los resultados de su actividad, mientras persiste el predominio del sector energíético.
En el tema relacionado con la seguridad alimentaria, el director del Instituto de economía agrícola, Ivan Ushachev, alertó que la situación en el agro empeora por impacto de factores negativos como el desplome del rublo, las sanciones de Occidente y el incremento de los precios de consumo.
Dijo el tambiíén miembro del Presidio de la Academia de Ciencias de Rusia que a causa de la devaluación del rublo se encarecieron demasiado los recursos para la producción agrícola y todo ello debe tenerse en cuenta en la adopción de medidas económicas, sugirió el experto ruso.
En su opinión, los costos de los críéditos para las empresas agrícolas son muy altos y consideró necesario que el Estado aporte una ayuda a la altura de los países desarrollados, en un período de tres a cinco años.
Para el presidente de la Unión Nueva Comunidad, Konstantin Babkin, el núcleo de una renovada política económica pasa por una nueva ola de industrialización del país y llamó a no perder las oportunidades que garantizarían un crecimiento sostenido de la economía.
Un dos por ciento anual no puede considerarse un crecimiento sino estancamiento, apuntó como colofón el representante del sector industrial y copresidente del Foro Económico de Moscú.
Con sede este año en la Universidad Lomonósov, el evento acadíémico se celebra desde 2013 para potenciar un espacio internacional de debate entre expertos de distintos países, volcado al diseño de estrategias, nuevos enfoques y programas anticrisis, enfilados sobre todo al desarrollo de la economía de Rusia.