El rumor se movía desde hace semanas por los mentideros de la capital. "CVC está negociando con los bancos la manera de sacar a bolsa IDC Salud, su grupo sanitario en España", decían las corrillos. Sin embargo, nadie se atrevía a confirmar la operación. Al final tuvo que ser una agencia de noticias con sede en Reino Unido, Reuters, la que soltara la noticia, asegurando haber tenido hasta seis fuentes distintas antes de publicarlo.
El teletipo emitido desde Londres el viernes ha dejado helados hasta a los propios directivos de la compañía sanitaria española, enfrascados todavía en organizar internamente las últimas adquisiciones realizadas en nuestro país: hasta ocho compañías en poco menos de un año. Según Reuters el fondo británico está valorando una salida a bolsa de la compañía para finales de 2015 o el primer trimestre de 2016. Y daba cifras concretas El fondo ha valorado la compañía sanitaria en unos 5.000 millones de euros. La valoración de IDC Salud sería de 12 veces el ebitda, que alcanza los 420 millones de euros.
En la compañía española están, a día de hoy, tranquilos. Todo lo tranquilo que puede estar un grupo controlado por un entidad de capital de inversión como CVC Capital Partners. El equipo liderado de Víctor Madera y Adolfo Fernández-Valmayor sabe que tarde o temprano el grupo será vendido o saldrá a bolsa, pero tienen la seguridad de que aún queda recorrido para ese momento. Al menos hasta el año que viene, sostienen fuentes internas del grupo.
Tirón en el mercado
La compañía, desde luego, tendría tirón en el mercado. Desde 2011, CVC ha invertido una cantidad cercana a los 3.000 millones de euros en este grupo, referente actual en la sanidad privada española. La historia sanitaria de CVC en España comenzó en 1998, cuando el fondo compró en España la antigua Capio, denominada entonces Ibíérica de Diagnóstico Cirugía (IDC, como el nombre actual), tras lo cual adquirió tambiíén en 2002 la Fundación Jimíénez Díaz, en Madrid. En 2005 CVC vendió Capio en España al grupo sueco Capio por 331 millones de euros. Sólo un año despuíés, la firma de inversión Apax se hizo con el grupo Capio a nivel mundial en una operación que superó los 1.800 millones. Y por último, en 2011, CVC volvió a comprar la división española de Capio por 900 millones de euros. Desde entonces, Capio primero se fortaleció a nivel interno, y desde el año pasado (ya con el cambio de nombre a IDC Salud) ha comenzado una expansión a base de adquisiciones que nunca antes se había visto en la sanidad privada española. En junio del año pasado, compró el 61% que su competidor Doughty Hanson poseía en el grupo hospitalario Quirón, en una operación que rondó los 1.500 millones de euros y que dio lugar a la mayor sociedad hospitalaria en España con 40 hospitales. Por si fuera poco, a final de año se hizo con las dos clínicas Ruber por unos 150 millones.
En este año, han llegado al grupo otras seis compañías sanitarias: Clínicas Rotger, Policlínica Gipuzkoa, y las sociedades de prevención de riesgos laborales de Fremap, Muprespa, MC Mutual y Mutua Universal, sumando en total unos 400 millones de euros de inversión desde la compra de Quirón. De esta manera, el nuevo gigante de la sanidad privada española es hoy un 30% más grande que hace diez meses, cuando anunció su unión con los hospitales de la familia Cordón Muro. La plantilla del nuevo grupo tambiíén ha experimentado en este tiempo un incremento parecido. Si la nueva IDC Quirón agrupa a unos 17.500 empleados en plantilla, más otros 4.500 míédicos asociados, las compañías adquiridas en este año sumarán al menos otros 6.238 trabajadores, un 35% más en total.
El grupo tiene por tanto mucho que consolidar todavía para alcanzar su verdadera cifra de negocio real, pero los rumores y las filtraciones llegadas desde Londres hacen pensar que la desinversión del capital riesgo puede llegar antes de lo esperado. El mercado suele tener tiempos distintos al de los directivos.
Alberto Vigario