EFE
Las compañías niponas que cotizan en Bolsa han acumulado acciones por valor de 100 billones de yenes (780.000 millones de euros/832.000 millones de dólares), una cantidad ríécord desde el inicio de la crisis financiera en 2008, informó hoy el diario nipón Nikkei.
Las empresas han aprovechado el incremento generalizado de sus beneficios para invertir más capital en acciones, animadas tambiíén por la continuada tendencia al alza del parquíé tokiota, que le ha llevado a cotas no alcanzadas desde el año 2000.
En el ejercicio fiscal japoníés 2014, que terminó el pasado 31 de marzo, las compañías adquirieron títulos por valor de 3,3 billones de yenes (25.740 millones de euros/27.720 millones de dólares), un 72 por ciento más que en el año precedente, según los datos publicados por el citado diario económico.
Además, durante el año pasado las empresas repartieron entre sus accionistas 9,5 billones de yenes (74.100 millones de euros/79.800 millones de dólares) en dividendos, un 10 por ciento más anual.
La mayor entrada de capital en las empresas niponas tambiíén las animó a realizar más inversiones en equipamiento o a la compra de compañías extranjeras.
Las compañías gastaron en capital 36,4 billones de yenes (283.920 millones de euros/305.760 millones de dólares) en 2014, un 5 por ciento interanual más, y destinaron 5,9 billones de yenes (46.020 millones de euros/49.560 millones de dólares), un 28 por ciento más, a fusiones y adquisiciones de empresas extranjeras.
El aumento del gasto de las empresas niponas es un factor clave para la revitalización de la economía nipona, y por ello el Gobierno ha insistido en que las compañías repartan sus beneficios crecientes entre sus accionistas y sus empleados, a travíés de mayores dividendos y subidas salariales.
Los datos confirman el buen momento del que disfrutan empresas y capitales financieros nipones, los más beneficiados hasta ahora por "Abenomics", la estrategia económica impulsada por el primer ministro Shinzo Abe, consistente en una política monetaria ultraflexible, un cuantioso gasto público y reformas estructurales.
El pasado día 10, el selectivo Nikkei alcanzó momentáneamente las 20.001,45 unidades, batiendo una marca intradía que no rebasaba desde el 17 de abril de 2000.
Tokio ha tardado 15 años en alcanzar esta barrera psicológica, un periodo que ha coincidido con una fase de estancamiento económico y deflación prolongada en Japón, unida al estallido de la crisis financiera global en 2008 desencadenada por la caída del banco de inversión estadounidense Lehman Brothers.