Por... Javier Penalva
Pasa en casi todos los segmentos de la tecnología. Llega un día en que una determinada especificación tíécnica explota y de repente se convierte en un valor que aparece directamente en la publicidad para todo el público cuando antes ni se mencionaba en la ficha tíécnica de un producto. En el producto estrella y más mimado de la electrónica, el smartphone, la cámara se ha alzado en muchos casos con el premio a característica que más valor le puede dar a un terminal. Y las compañías lo saben. Por eso, desde hace un tiempo, hemos asistido al desmembramiento de la cámara.
Se empezó por la resolución, luego con el tamaño del sensor, la estabilización óptica y hasta nos atrevimos a discutir sobre el tamaño de los fotoreceptores cuando HTC presentó sus ultrapíxeles. Este 2015 la apertura va camino de convertirse en la especificación que más se explote para convencernos de que la cámara de nuestro smartphone es mejor que la de los demás. Pero, ¿quíé es la apertura máxima de una cámara (o mejor, de un objetivo) y quíé debes conocer sobre ella?
Quíé es la apertura máxima de una cámara y en quíé afecta a las fotos que haces
La apertura de una cámara de fotos, tambiíén conocida como número f, nos indica la luminosidad del objetivo que incorpora. Esto es, la capacidad de que llegue al sensor más o menos luz a traves del diafragma. Una apertura mayor, representada por un número f menor, dejará pasar más luz que una apertura menor (f mayor).
La apertura de un objetivo viene reflejado por los valores máximos para las focales extremas en el caso de un objetivo zoom, o un solo valor, el máximo, en el caso de objetivos fijos.
La entrada de mayor o menor luz al sensor tiene consecuencias directas a la hora de permitirnos una mayor velocidad de disparo e imágenes con menos ruido en condiciones de poca luminosidad. Esto es así porque podremos escoger velocidad de obturación y sensibilidad más reducidas respectivamente.
Profundidad Campo
Pero la apertura tambiíén está relacionada directamente con la profundidad de campo. De forma sencilla estamos hablando de la distancia por delante y por detrás del punto enfocado que aparece con nitidez en la foto. Si la apertura es grande, se reduce esa distancia, consiguiendo efectos como el bokeh. Si por el contrario la apertura del objetivo es reducida (f grande), podremos disponer de más elementos nítidos en la imagen que queremos tomar.
Precisamente por eso, la nitidez está relacionada con la apertura, de manera que de forma general, los objetivos ofrecen una mayor nitidez con determinadas aperturas del diafragma, que suele estar entre f8 y f11. Al cerrar el diafragma evitamos aberraciones cromáticas y distorsiones, y en teoría deberíamos obtener más nitidez, pero la difracción aumenta y perdemos por lo tanto nitidez. Si aumentamos la apertura, la nitidez aumenta sobre el papel pero aparecen otros problemas asociados.
La apertura en los smarpthones
Si nos ceñimos ahora al rol de la apertura en las características fotográficas de los smartphones, podemos afirmar que, de entrada, tener una mayor apertura (número f más pequeño) en la cámara de un smartphone es una buena noticia. Nos da la posibilidad como hemos dicho de que llegue más luz al sensor.
Sobre el papel y de forma aislada, sí, una apertura mayor es una buena noticia para la cámara de un smartphone
De forma general, el paso de una f2.4 a una f2.0 supondrá que en el segundo caso estemos dejando pasar un 50% más de luz. Eso beneficiará a la velocidad de disparo y tambiíén al ruido teórico que obtendremos en la imagen con poca luz al no tener que optar por sensibilidades altas.
Pero si ya en fotografía "de mayores" no se puede considerar el número f como una cifra única ni aislada que nos ayude con la calidad de imagen, en fotografía con un smartphone todavía es más complicado relacionar una mayor apertura con mejor calidad de imagen de forma directa. El sistema fotográfico se compone de muchos elementos, desde el procesador al tamaño del sensor, y por ejemplo, una apertura más grande va a demandar lentes de mayor calidad y más caras. Apostar pues por una f baja requerirá que otros elementos de la cámara acompañen para obtener realmente resultados mejorados.
Otra consideración importante en la apertura de las cámaras de los smartphones es que el número es fijo. Esto significa que obtendremos tanto las ventajas como los inconvenientes asociados a una apertura grande. Esto es importante tenerlo en cuenta porque además de la luz, la apertura afecta a otros aspectos de la imagen que podemos tomar. Por ejemplo, una apertura mayor (número f más bajo) influye en la profundidad de campo, la nitidez y las aberraciones en la imagen.
Tener una apertura mayor requiere por parte del fabricante acompañarla de otros elementos de máxima calidad
Cuanto menor sea el número f, menos profundidad de campo tenemos (que viene bien para tener buenos fondos desenfocados), más complicado podría ser conseguir la nitidez máxima de la lente y más propensos a aberraciones cromáticas y distorsiones estamos expuestos. Lógicamente los fabricantes trabajan intensamente para que estos problemas no aparezcan o se reduzcan y de ahí lo que justo decíamos antes: no se trata solo de valorar el número f de la publicidad de la cámara sino lo que lleva alrededor.
¿Y cómo está la carrera actual por tener el smartphone con mayor apertura?
Pues muy disputado como puedes ver en la siguiente tabla:
LG G4 Sony Xperia Z3 Samsung Galaxy S6 iPhone 6 HTC One M9 Nokia Lumia 1020 Nexus 6
Apertura f1.8 f2.0 f1.9 f2.2 f2.2 f2.2 f2.0