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Trabajadores de la mayor cadena mundial de restaurantes de comida rápida, McDonald's, protestaron ayer en esta capital contra las violaciones laborales y bajos salarios de esa empresa en Brasil.
Los manifestantes se concentraron frente a la torre de televisión y marcharon hasta uno de los establecimientos de esa transnacional ubicado en la aledaña avenida Exo Monumental para denunciar las transgresiones de los derechos de los empleados.
Poco antes, participaron en una audiencia en el Senado para exigir acciones punitivas contra la empresa por pagar sueldos por debajo del mínimo (poco más de 300 dólares) fijado por ley y no costear las horas extras.
Siempre nos quejamos y McDonald's solo promete buscar soluciones, pero no hace nada, señaló uno de sus empleados, Moacyr Auersvald, al reclamar la necesidad de que dicha cadena de comida rápida cumpla la ley brasileña.
En un comunicado difundido por la prensa, la empresa desestima que viole la legislación nacional y muestra orgullo por ser la puerta de entrada de millares de jóvenes al mercado laboral.
