El Gobierno de Brasil prevíé una caída del 2,44 % del producto interior bruto (PIB) y una inflación del 9,29 % en 2015, según un documento oficial divulgado ayer y que ha de ser remitido al Congreso.
De acuerdo con los datos del documento divulgado por el ministerio de Planificación, que se elabora cada dos meses, la situación ha empeorado en relación con el último informe, en el que el Ejecutivo preveía un retroceso en la economía del 1,49 % y una inflación del 9 %.
Este informe viene a confirmar las peores expectativas del Gobierno de Dilma Rousseff.
Sin embargo, aún están por encima de las últimas las proyecciones semanales de los analistas del mercado financiero divulgadas este lunes por el Banco Central, que prevíé una contracción del 2,70 % en 2015.
En cuanto a la inflación de 2015, los expertos consultados por el Banco Central tambiíén consideran que el dato será peor ya que su proyección hablan de un aumento de los precios del 9,34 %.
En cualquier caso, ambas previsiones de la inflación duplicarían la meta oficial del 4,5 % y superarían el techo máximo del 6,5 % marcado por el propio Ejecutivo.
Brasil se encuentra en recesión tíécnica tras encadenar dos trimestres de crecimiento negativo entre enero y junio de este año.
La agencia calificadora Standard & Poor's (S&P) redujo recientemente la nota de riesgo de Brasil al nivel BB+, considerado como "bono basura".
EFE