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MADRID.- El futuro de las viviendas pendientes de entrega por parte de Martinsa Fadesa -en concurso de acreedores desde julio- es cada día más incierto. La promotora ha comenzado a informar por carta a sus clientes de que suspende el cobro de los anticipos pactados. La empresa indica que no puede concretar el inicio de las obras y recomienda depositar el dinero en el banco hasta que no tenga fecha concreta. Admite que sólo tiene recursos para acabar 770 viviendas de las 12.500 que tiene comprometidas.
La inmobiliaria, en suspensión de pagos desde el pasado 15 de julio, subraya en su carta que mantiene el proceso de negociación abierto con la banca para garantizar la financiación de los proyectos. Pero deja claro a los compradores que no puede «concretar la fecha de inicio de las obras de la promoción en la que adquirió la vivienda».
Ante esas incertidumbres, la compañía ha decidido «no pasarle el cobro los pagaríés que en su día nos entregó como parte del precio del contrato», sin que esa decisión afecte a la vigencia del contrato rubricado, según reza el remitido a los compradores.
Es más: la compañía recomienda a sus clientes realizar en su cuenta bancaria la provisión de fondos equivalentes a los pagaríés entregados para hacer frente a sus pagos en el caso que se inicien las obras. Fuentes de Martinsa Fadesa indicaron que la carta ha sido remitida a los clientes de un total de siete promociones. Afirman que dejar de pasar los recibos mensuales ha sido considerada la opción más responsable y la más conveniente hasta no tener atado el respaldo financiero para concluir la construcción.
Las citadas fuentes señalaron que la voluntad de la empresa es cumplir los compromisos adquiridos con los compradores y terminar el mayor número de viviendas posibles, pero sin precisar número. Su continuidad depende de los bancos con los que tiene contraído el críédito para financiar el proyecto.
De momento, según un comunicado remitido ayer a la Comisión nacional del Mercado de Valores (CNMV), la compañía dispone de garantías y recursos para acabar 770 casas. Una cifra muy modesta, teniendo en cuenta que la empresa tenía antes de presentar el concurso unas 12.500 casas prevendidas en todos los mercados en los que operaba, 7.000 de ellas corresponden al mercado español.
Desde el bufete de abogados Ofilegal, que lidera la Asociación de Afectados de Martinsa Fadesa, se considera que el volumen de clientes que se encontrarán liberados de hacer frente a sus pagos irá engordando cada día que pase por la negativa de las entidades a financiar promociones a no ser que estíén a punto de ser terminadas o que estíén vendidas prácticamente en su totalidad.
Fuentes de esta asociación indican que, ante el rechazo de la banca, la compañía está intentando negociar la venta de esas construcciones a sus competidores. En el caso de las promociones públicas, las administraciones competentes están estudiando las posibilidades para traspasar la adjudicación a otras empresas.
En el mejor de los casos, según fuentes de las entidades financieras acreedoras, Martinsa Fadesa no podrá entregar más del 20% o del 30% de las promociones comprometidas. En principio, según estas fuentes, sólo se facilitarán críéditos para aquíéllas construcciones viables. Esto es: las que se encuentren próximas a la entrega de llaves que estíén prácticamente vendidas. «Si no se dan estas circunstancias», afirman, «es preferible que se devuelvan los anticipos entregados por los compradores».
Por otra parte, la firma comunicó ayer que no ha logrado el respaldo de sus acreedores para presentar un convenio anticipado. Sin embargo, pretende alcanzar un acuerdo a lo largo del próximo mes de diciembre, coincidiendo con la presentación del informe de su administración concursal.
Miles de compradores atrapados
Clientes afectados. Martinsa Fadesa contaba con unas 12.500 viviendas prevendidas y en diferentes fases de edificación en el momento de presentar el concurso. Unas 7.000 estaban ubicadas en diferentes regiones españolas.
Inexistencia de avales. Algunos clientes no cuentan con avales que garanticen el depósito de las cantidades entregadas a cuenta antes de la entrega.
Problemas para la ejecución. Aún disponiendo de avales y habiíéndose producido incumplimiento en el contrato, algunas entidades financieras se oponen a devolver los anticipos entregados.
Sin pagar, pero sin cobrar. Los compradores a los que se les ha congelado los pagos no podrán disponer de su dinero hasta que se produzca el incumplimento en la fecha de entrega de las llaves.