La entidad alemana ha obtenido un beneficio de 435 millones de euros en el tercer trimestre, frente a los 1.600 millones obtenidos en el mismo periodo del año anterior. Las cuentas de Deutsche Bank han sorprendido al mercado, ya que se esperaba que la entidad publicase píérdidas. Las nuevas normas de contabilidad han sido las artífices de este cambio en sus resultados, lo que le ha permitido además apuntar menos provisiones.