Poco se ha sabido tras las dos reuniones que la FIA organizó entre los fabricantes y la organización de la Fórmula 1 en Ginebra a principios de semana: tan sólo la continuidad de los motores V6 hasta 2020 y, eso sí, una reducción de sus costes de 20 a 12 millones que entrará en vigor en 2018.
El acuerdo, en el que tanto Ferrari como Mercedes han jugado un papel importante, no termina de agradar a la Federación Internacional del Automóvil, aunque según asegura Jean Todt a 'Sky Sports' ellos no tienen "mucho que hacer en este aspecto": "Tan sólo somos un enlace entre equipos, fabricantes y los titulares de los derechos comerciales", explica.
Como ha insistido en otras ocasiones, para Todt el problema está en la desigualdad: "Si das la mayor parte del dinero a los ricos y lo poco que resta a los pobres, adivina lo que va a suceder. Yo síé hasta quíé punto tengo poder, y no puedo decir 'da más dinero a este en vez de a este otro'. Eso no está en nuestras manos", afirma.
Lo único que podemos hacer es encontrar reglas que no penalicen al que tiene menos dinero, pero siempre primará el interíés propio"
"Lo único que podemos hacer es encontrar reglas que no penalicen al que tiene menos dinero. Hay gente que tiene un barco de 50 metros y otros que no pueden ni beberse un vaso de agua, la vida es así. Por eso digo que tras nuestras puertas de oro deberíamos tener dirigiendo a gente sensata que haga lo mejor para nuestro deporte. Desafortunadamente siempre primará el interíés propio sobre el general, pero sería más sano si hubiese reglas más igualitarias para todos", sentencia.
