Es remotamente probable que Fernando Alonso decida retirarse tras el primer día de test en Montmeló. El piloto español tuvo un día verdaderamente ocupado en su primera toma de contacto con el MP4-31, con el que completó casi dos grandes premios completos (119 vueltas). Todo ello sin una complicación de gravedad en el nuevo motor.
Si había algún examen por encima de cualquier otro para esta primera semana, este era el de la fiabilidad. Con más de 200 vueltas en dos jornadas, habrá que determinar que Honda ha dejado atrás sus peores pesadillas, por mucho que luego se le exijan prestaciones. Al menos, ya está en condiciones de acabar carreras como el resto de competidores. Es un paso adelante y el asturiano así lo aprecia.
Si se miran las prestaciones, el panorama es algo más complicado de dilucidar. Si al motor le queda una gran mejora para el inicio del Mundial (Button confirmó el lunes que no es el definitivo) y ahora circula con las precauciones propias de quien quiere acumular kilómetros, los registros, a 2,5 segundos del Force India en velocidad pura, no deben ser tenidos muy en cuenta.
En orden de carrera, con las gomas medias (utilizadas por Pirellli en el Circuit habitualmente en el G.P de España) el ritmo puede establecerse en 1,5 segundos de desventaja respecto a Mercedes. Parece mucho, pero supone un importante salto y una base para mejorar a lo largo del año.
En lo que se refiere a la cabeza de la tabla, Ferrari y Red Bull probaron por primera vez los neumáticos ultrablandos, marcados con el color magenta y que Pirelli estrena este año. Los resultados saltan a la vista, primero y segundo, batiendo el tiempo de la pole del año pasado y con 0.715 de ventaja para Vetel respecto a Ricciardo. Esa es una de las primeras diferencias claras de rendimiento en estos test.
Por otro lado, el que ha impresionado es el Mercedes de Rosberg. Han sido nada menos que 172 vueltas y el tercer mejor tiempo del día. Eso sí, logrado con el compuesto medio (tres escalones más lento que el de sus rivales) y en una serie de 18 vueltas. El coche de la estrella sigue siendo, pese a los fuegos artificiales, el rival a batir.
Destacó tambiíén Checo Píérez, tercero con neumáticos blandos en su Force India, al que sólo le separó una díécima de Ricciardo. El nuevo VMJ09 es un coche que promete en este inicio de año.
Hubo pocos incidentes de bandera roja, salvo una parada del Toro Rosso de Verstappen y otra del Renault de Palmer, que tuvo que acabar su jornada sobre las 14.30 de la tarde. Por el contrario, el coche de Faenza pudo continuar con su versión inicial del STR11, un monoplaza con muchas piezas del año pasado. Max completó más de 120 vueltas, para finalizar último en los tiempos, aunque eso no preocupa por el momento para un equipo que traerá una gran mejora dentro de una semana en este mismo escenario.
