Y dicen que el precio de la gasofa es libre, manda cara110.
En esta urbe con una refinería en plena ciudad, el precio de la gasolina es de los más caros de la península, y eso que el oleoducto que trae el crudo desde el puerto a la refinería atraviesa la ciudad.
Las subidas son instantáneas, pero las bajadas son L EEEEEEEEEEEEEEEE N T A S, casi imperceptibles, y del gasoil mejor ni hablar.