Por... Eduardo Ibarra Aguirre
El Consejo Ejecutivo de Empresas Globales entregó al titular del Ejecutivo federal la Agenda Míéxico 2030: Propuestas para un crecimiento incluyente ante la cuarta revolución industrial. Se trata de un organismo integrado por las 50 trasnacionales más fuertes con presencia en Míéxico, generan 10 por ciento del producto interno bruto, representan 11 por ciento de las exportaciones “mexicanasâ€, 40 por ciento de la inversión extranjera directa, generan 500 mil empleos directos y 1.5 millones de puestos de trabajo indirectos; según el comunicado de la Presidencia.
Por alguna razón que no explica el boletín oficial, la reunión fue privada. En el documento entregado por representantes de las trasnacionales a Enrique Peña Nieto se incluyen propuestas para lograr “un crecimiento económico con mayor inclusión e impulsar la transformación y el bienestar†de la sociedad mexicana. El concepto trasnacionales está muy desprestigiado en la aldea y aquí prefieren autodenominarse empresas globales, como si ello cambiara su naturaleza depredadora del medio ambiente y expoliadora de la fuerza de trabajo y del país.
Para Peña Nieto el encuentro ratifica la confianza del CEEG en Míéxico y en su transformación, y confirma que el gobierno y aquíél “comparten una misma visión: que a Míéxico le vaya bienâ€. Más aún: La Agenda Míéxico 2030 está en sincronía con los esfuerzos del gobierno de la república. Y muchas de las cosas positivas que suceden en el país son gracias y “fundamentalmente a la participación de actores económicos de empresas globales que creen, se la juegan y tienen puesta su mira en el horizonte pensando en Míéxicoâ€.
Más allá de la incondicional adscripción al dogma neoliberal, sería pertinente que Peña explique cómo logró el milagro para que los intereses de un puñado de trasnacionales –de las 200 que dominan dictatorialmente al mundo– tengan los mismos intereses que la nación, cuando es sabido que como el capital, no tienen patria, buscan las más altas utilidades y se sobreponen a Estados y autoridades que lo permiten.
Con optimismo desbordado, el maestro en administración de empresas juró que “trabaja bajo la óptica de ver en los desafíos y en los retos una gran oportunidad para seguir construyendo y en esa construcción les hago una invitación para que sean parte de este importante esfuerzo para que sus empresas crezcan, sigan extendiíéndose en Míéxico y en el mundo, y Míéxico junto con ellas tambiíén alcance niveles de mayor desarrolloâ€.
O las trasnacionales “se la juegan y tienen puesta su mira en el horizonte pensando en Míéxicoâ€. O bien les formula “una invitación para que sean parte de este importante esfuerzo. Demasiados son los redactores de discursos que pagan los causantes para que se produzcan cantinflismos sin mediar el humor de Mario Moreno.
Fríédíéric García, presidente del CEEG, explicó que con la Agenda Míéxico 2030 dejarán los cimientos para que en 13 años Míéxico se coloque entre los cinco primeros exportadores de la aldea, duplique la productividad laboral, el producto interno bruto per cápita sea del doble y “mejore su distribuciónâ€, así como crear un millón de empleos formales al año. Todo ello sustentado en “el libre comercio†(seguramente como el que practica Estados Unidos con Cuba, Rusia y todos los países que no acatan sus dictados imperiales), el contexto actual, las oportunidades y los desafíos, la cuarta revolución industrial y el complejo contexto internacional.